BUENOS AIRES (ANP).- El ex-representante de Argentina ante el Fondo Monetario Internacional (FMI), Héctor Torres, relativizó la efectividad de las críticas que realizó el ministro de Economía, Sergio Massa, al organismo, y pidió volver a tener superávit tanto en el sector comercial como fiscal, como ocurrió durante la gestión de Roberto Lavagna al frente del Palacio de Hacienda.
«El Fondo es una institución que posee una piel dura y es difícil que se vea afectada por este tipo de declaraciones», dijo Torres, en declaraciones a CNN-Radio.
De esta manera, Torres se refirió a los dichos de Massa, quien en la noche del lunes advirtió que “gobernamos una Argentina condicionada por un acuerdo”. Este pacto con el Fondo “nosotros no lo fuimos a buscar” y ese dinero que tomó Mauricio Macri “no quedó en la Argentina”.
En la víspera, Economía informó que pagará los US$ 2.700 millones que vencen en julio a fin de mes, mientras que continúan las negociaciones “virtuales”, ya que no han viajado a Washington, Leonardo Madcur, y el secretario de Política Económica, Gabriel Rúbinstein, para tener un diálogo presencial con las autoridades del Fondo.
Luego de haber pagado US$ 2.700 millones el viernes pasado, el calendario acordado preveía un nuevo pago de casi US$ 1.300 millones para este viernes.
Para Torres, que representó a Argentina ante el FMI durante las gestiones de Lavagna y Alfonso Prat Gay, el ministro Massa “tiene que convencer al Fondo para que le den dólares y poder comprar pesos al doble de lo que vale”.
“Massa quiere sostener un tipo de cambio en el que nadie cree y lo quiere sostener antes de las elecciones. Todo lo que dice Massa es parte de una retórica que no tiene sustento», expresó Torres.
Para el ex funcionaro, más allá de definir una postura frente al FMI, Argentina debería asumir una postura frente a sí misma.
«Tenemos que aceptar que no podemos vivir por encima de nuestros medios. Para generar un superávit comercial y dólares genuinos, tenemos que promover exportaciones y no penalizarlas. Tenemos que cambiar de política económica con toda claridad, generar empleo privado y favorecer la inversión. Todo eso lleva cambios estructurales en la economía argentina», detalló, y destacó que «estamos en los grupos minoritarios (de países) que dependen del Fondo».