BUENOS AIRES (ANP).- El ministro de Economía, Sergio Massa, continuará hoy con la gira federal que lleva adelante desde hace unos días para afianzar la unidad del oficialismo y recortar el avance que mostró el candidato de La Libertad Avanza, Javier Milei, en las últimas elecciones primarias a nivel país.
Massa hoy encabezará en la provincia de La Rioja una serie de actividades, entre ellas la entrega de viviendas y la entrevista con dirigentes empresariales locales, mientras su equipo ultima los detalles del proyecto de ley de Presupuesto 2024, un documento en el que el candidato presidencial de Unión por la Patria deberá dejar impreso un número muy incómodo de cara a las elecciones de octubre: la estimación del IPC final de 2023.
El requisito de presentar la propuesta —que tiene plazo legal hasta este viernes a la medianoche— no puede llegar en peor momento porque el dato de agosto publicado ayer por el INDEC, de 12,4% mensual, desató todo tipo de ataques por parte de la oposición, analistas y de la prensa, quienes se ocuparon en resaltar que la inflación de Argentina resultó la tercera más alta a nivel mundial.
Con este escenario, las versiones indican que el jefe del Palacio de Hacienda aceptó el pedido formal de su competidor Milei para postergar el debate del proyecto de Presupuesto 2024. Según reportó Infobae, el ministro estaría de acuerdo en analizar la propuesta después de las elecciones, aunque el texto igualmente llegaría al Congreso en tiempo y forma.
Por eso, en este punto el debate del presupuesto sería el menos delicado de los problemas que esperan a Massa. Una pelea mayor se aproxima en el Congreso por la aprobación de la modificación del mínimo no imponible del Impuesto a las Ganancias, una herramienta electoral de la que Massa echó mano a última hora para que muchos de los asalariados dejen de pagar el tributo.
El diputado Mario Negri fue el encargado de anticiparle que el interbloque de Juntos por el Cambio decidió que no votará en ese debate porque «no acompañará el camino de Massa a la hiperinflación».
Si eso ocurre, faltando tan poco para la elección general, a Massa solo le quedará capitalizar la negativa opositora e incorporarla a su discurso de campaña para mostrar a los argentinos que la mejora prometida por la baja del impuesto no llegará por culpa de JxC.
La contrapartida de este recurso radica, sin embargo, en el día a día de muchos ciudadanos que están a años luz de calificar para pagar Ganancias, a quienes solo impacta el dato de IPC. La inflación es la verdadera batalla que desvela al ministro, quien para responder al golpe producido por el dato de agosto eligió responsabilizar al Fondo Monetario Internacional por haber exigido una devaluación del peso.
Si se mira de ese modo, Massa podría haber perdido ya la contienda electoral porque a pesar de las medidas paliativas que tome en los próximos días, es improbable que ocurra algo de aquí al 22 de octubre que cambie significativamente las cifras de inflación. Es más, según Gustavo González, director del OPSA (Observatorio de Psicología Social Aplicada) de la Facultad de Psicología de la UBA, Massa perdería en los dos escenarios de balotaje posibles.
En declaraciones efectuadas ayer por el experto al programa Regreso CNN, el escenario quedaría con Javier Milei (37%), Sergio Massa (32%) y Patricia Bullrich más abajo.
La conclusión del consultor, con la que varios concuerdan, es que en un balotaje Massa-Milei el candidato libertario ganaría holgadamente ya que captaría a los votantes de Bullrich. Si la competencia del ministro resultara Bullrich, no hay demasiada duda de que los electores de Milei la acompañarían. Con ese panorama desalentador, Massa irá por un nuevo intento de alcanzar la presidencia mientras pelea contra el gran enemigo, que siempre fue la inflación.