Buenos Aires, jun 17 (ANP) – El gobierno decidió empezar a levantar la ayuda que le está dando a las empresas a través del programa comunmente conocido como ATP. Los subsidios a los salarios de las empresas privadas continuará para aquellos casos en los que sean actividades no esenciales y en áreas de cuarentena.

El gobierno considera que el 85% del territorio  país se encuentra ya operativo y que por ello ya estarían las empresas en condiciones de retomar la normalidad.  El gobierno habla de «readecuación».

En lo que refiere al ATP, para el pago de salarios del mes de julio, que se liquidan en agosto, se determinó la utilización de dos variables; una relacionada con lo sectorial y la otra con lo geográfico.

La primera variable se refiere a «sectores críticos» que por el momento están imposibilitados o con severas dificultades para funcionar.
La segunda variable es la «geográfica» que, a partir del DNU 520, determinó que una parte de la Argentina está en DISPO y otra parte que continúa en ASPO.

La decisión del gabinete económico fue concentrar «mayores recursos en aquellos lugares que están atravesando una situación más complicada por el alto nivel de contagio y que, por ende, tienen la actividad productiva más afectada».

Asimismo, se definió que las empresas incluidas sean las que tengan hasta 800 trabajadores en sus plantillas, salvo en los sectores críticos -en donde no hay ninguna restricción de tamaño.

Con respecto a los créditos, se determinó la ampliación del crédito al 24%, del que estará a cargo el Banco Central, además de la nueva línea, denominada «Línea Pyme Plus», que gestiona el Ministerio de Desarrollo Social junto al Banco Central y que está dirigida a un universo de pymes que nunca antes habían tomado un crédito bancario.

Por último, hay una línea particular para cooperativas al 18% que se está implementando entre el Banco Central y el Ministerio de Desarrollo Productivo. El objetivo planteado por el gabinete económico es que la nueva dinámica del ATP se acompañe de las diversas líneas de créditos, porque hay muchas empresas que ya recuperaron su actividad y las necesidades difieren según su estado de funcionamiento.