Buenos Aires, (ANP) – El presidente Alberto Fernández va a pasar a la historia como aquel mandatario que le dio rienda suelta a la “maquinita” de imprimir billetes pero lo que pasa desapercibido es que junto con ello también encendió la “licuadora”. Se estima que desde que empezó su mandato el gobierno disolvió por efecto de la inflación un total de pesos equivalentes a u$s10.000 millones.

El dato figura en el último informe de la sociedad de bolsa GMA Capital. Allí se señala que “desde el punto de vista de la cantidad de moneda en la plaza, tanto la base monetaria como el M2 privado se vienen contrayendo casi de manera sostenida desde el pico de la pandemia”.

“Hacia julio de 2020, el primero había llegado a representar 9,4% del producto, mientras que el segundo 16,1%. Hoy, sin embargo, equivalen a 5% y 13% del PIB respectivamente. En otros términos, la inflación habría licuado u$s 10.200 millones de pesos transaccionales del M2 privado desde julio de 2020”, dice la nota.

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El reporte señala que “no obstante el M3 privado (que incluye los depósitos a plazo) sí que se mantuvo incesantemente por encima de la media en períodos sin cepo”.

Por ejemplo, en el período 2016-2019 el M3 privado promediaba 19,1% del producto. Hoy dicho agregado representa 23,6%del PIB. O lo que, medido al dólar oficial, representa un “exceso” de USD 21.000 millones, prácticamente análogo a la desmonetización de la base monetaria por USD 17.800 millones”, dice el informe.

Al respecto, GMA Capital explica que “el crecimiento del M3 privado es la contracara del aumento de los pasivos remunerados del Banco Central”.

Como hemos señalado, la máquina de los pesos se mantiene encendida por factores exógenos. Sin embargo, la misma se ve compensada por la esterilización a través de Leliq y Pases. Desde que comenzó el año, los pasivos remunerados pasaron de $ 10 billones a $ 15 billones. Un aumento nominal de 50% que, ajustando por inflación, representa un incremento del 4,8% real. Esto ocurrió a pesar de haber devengado intereses por debajo de la inflación casi de manera sostenida”, dice el informe.

El trabajo indica que “si bien hoy por hoy en el Mundo Pesos el mayor desvelo gira en torno a la deuda del Banco Central, también es cierto que la desmonetización de la economía y el perfil menos exigente de la deuda en pesos quitaron presión por este frente”. “Así, las cosas, el mayor riesgo inminente de la economía no radica en la cantidad de pesos, sino en la escasez de dólares”, dice el informe..