BUENOS AIRES (ANP).- El rechazo de la Corte Suprema de pronunciarse en forma rápida sobre si Donald Trump debe ser procesado por cargos de insurrección, una medida extrema de la Carta Magna, favorece la estrategia del expresidente estadounidense de demorar el juicio en su contra con miras a las elecciones de noviembre.
El máximo tribunal rehusó opinar el viernes sobre un pedido del fiscal especial Jack Smith para decidir si Trump gozaba de “inmunidad presidencial” cuando se presume trató de subvertir el resultado de las elecciones de 2020, que ganó el demócrata Joe Biden, y por el asalto al Capitolio el 6 de enero de 2021.
La Corte no ofreció ningún tipo de explicación, señalando solo que el pedido de Smith “fue denegado”. De esta manera, el fiscal especial buscaba que los jueces se saltearan el camino normal del Tribunal Federal de Apelaciones de Washington y, en consecuencia, resolvieran rápidamente la cuestión.
Por el contrario, los abogados de Trump querían que se demorara el inicio del juicio contra el magnate que busca convertirse en el candidato presidencial de los republicanos en las elecciones del 5 de noviembre de 2024. Por lo tanto, la decisión de la Corte Suprema fue considerada una victoria parcial del ex mandatario.
Esta semana, por otra parte, la Corte Suprema de Colorado descalificó a Trump para presentarse en las primarias de ese estado, a raíz de su vinculación con la insurrección del Capitolio en 2021.
Sin embargo no es la primera vez que el magnate es cuestionado por la justicia electoral, ya que los estados de New Hampshire, Minnesota y Michigan, trataron de sacar al exjefe de Estado de la boleta electoral, pero fracasaron en sus intentos.
Trump perdió en Colorado en 2016 y 2020 a manos de los demócratas. Sin embargo, la decisión de este tribunal podría servir de antecedente para otros estados, debido a que es la primera vez que se apela a la sección 3 de la Enmienda 14 de la Constitución estadounidense.
Este texto prohíbe a las personas que han participado en una insurrección ocupar un cargo en una elección popular.
“No creo que ningún tribunal deba impedir que Donald Trump sea presidente de Estados Unidos”, dijo el exgobernador de Nueva Jersey, Chris Christie, que compite con el magnate inmobiliario en las primarias de los republicanos.
Trump, favorito para ganar las elecciones, atacó recientemente a los inmigrantes que ingresan ilegalmente a Estados Unidos, sobre todo de México, razón por la cual los demócratas han asociado sus declaraciones con los del genocida nazi Adolf Hitler.
“Es una locura lo que está pasando. (Los inmigrantes) están destruyendo la sangre de nuestro país. Eso es lo que están haciendo. No les gusta que diga esto”, dijo el magnate, asegurando que nunca leyó “Mein Kampf (Mi lucha), el libro escrito por Hitler contra los judíos a principios del siglo pasado.
Algunos analistas señalan que el fallo adverso de Colorado pueda ayudarlo a Trump en sus pretensiones de volver a la presidencia, ya que la experiencia dice que el expresidente republicano se fortalece cuando recibe un revés político, tal como ya ocurrió en otras contiendas electorales.
Trump apelará la sentencia de Colorado ante la Corte Suprema de Justicia, que cuenta con una mayoría conservadora de seis contra tres.
“La Corte Suprema va a decidir el caso de Colorado en forma rápida, ya que otros estados buscan hacer lo mismo.
Hoy, Trump está imparable, tanto dentro de su partido como también frente a una supuesta confrontación con Biden”, dijo el director de Latam Advisors, Sebastián Mariel.
En declaraciones a la Agencia Nuevas Palabras, el analista que no acostumbra a rotular a los presidentes por su discurso político, opinó que Trump es ideológicamente similar a (Donald) Reagan (1981-1989), y nadie por eso tilda a Reagan como un ultraderechista”.
Cuando se le preguntó si Trump es el mentor de otros líderes como el exmandatario brasileño Jair Bolsonaro o el actual presidente argentino, Javier Milei, el experto en política, economía y legales de Estados Unidos señaló que “el mundo ha sufrido muchos cambios forzados y la población ha reaccionado votando a candidatos que representan un ´volantazo´ a la política tradicional”.
Reagan y la ex-primera ministra británica Margaret Thatcher formaron una alianza conservadora a fines del siglo pasado que fue decisiva para la caída de la ex Unión Soviética en 1991, según opinan algunos analistas.
Tanto uno como otro promovieron la baja de impuestos, la reducción del gasto social, restricciones en el gasto público y la máxima iniciativa privada, entre otros puntos que avalaron la libertad del mercado. Ambos fueron decisivos para la retirada de las tropas de la Unión Soviética en Afganistán, el 15 de mayo de 1988.
Maril opinó que “Trump, al ser presidente de la primera potencia mundial, por supuesto que será el líder natural de todos presidentes que se alinean con él”, si gana de nuevo la presidencia.
Actualmente, el magnate estadounidense encabeza todas las encuestas de intención de voto para ser proclamado candidato del Partido Republicano para las elecciones del 5 de noviembre de 2024.