BUENOS AIRES, NOV 29 (ANP) – De acuerdo con los últimos datos del Banco Central, la cantidad de reservas internacionales brutas que le quedan a la autoridad monetaria descendieron a u$s42.038 millones, una cifra que es prácticamente igual a la que había el viernes 20 de agosto, horas antes de que el FM le mandara a la Argentina los u$s 4.334 millones de los Derechos Especiales de Giro (DEGS) que le correspondieron por la emisión de u$s650.000 millones que hizo el organismo de crédito.

El lunes 23 de agosto ingresó el dinero, y las reservas pasaron a ser de u$s46.306 millones. Ese dinero, se supone, estaba destinado al pago de los vencimientos de este año con el BCRA. Cuando todavía resta pagar un vencimiento de u$s1.900 millones en diciembre, las reservas ya descendieron a u$s42.048 millones, es decir, que ya están en el mismo nivel de antes de que llegaran los fondos del FMI.

El septiembre, el gobierno incorporò los DEG al Presupuesto mediante un decreto de necesidad y urgencia el 622/2021. Eso es asì porque el organismo multilateral le entrega los fondos al gobierno argentino. Los DEG en rigor son del Tesoro y para el BCRA son un pasivo.

Ese dinero que le cayó del cielo al gobierno argentino fue el que hizo que el ministro Martín Guzmán no tuviera necesidad de apurar el acuerdo durante este año, ya que no corrìa riesgo de caer en default.

Los vencimientos de deuda del 2021 quedaban pràcticamente cubiertos con ello. Hasta ahora el gobierno pagó compromisos por u$s2.500 millones.

Los derechos especiales de giro salieron del pasivo del BCRA. Las Asignaciones de DEG (como se contabilizan) bajaron $472.583.972.000 a $44.507.633.000. Y en ese marco, el Tesoro le entregò Letras instransferibles a 10 años. El stock de letras en el activo creció de $5.244.168.144.000 a $5.244.760.176.000.

El articulo 3 del DNU indica que «los recursos provenientes de la suscripción de las letras a la que alude el artículo 3° del presente decreto solo podrán aplicarse al pago de obligaciones con el FONDO MONETARIO INTERNACIONAL (FMI)».

En rigor, lo que ocurriò es que el BCRA le compró los DEG al Tesoro con pesos y con esos recursos el Tesoro pudo gastar más, eludiendo la restricción de la Carta Orgánica del organismo porque estaba al limite de los adelantos transitorios. A su vez el Tesoro le colocó a la autoridad monetaria una letra intransferible con la cual retiró los dólares y le pagò al FMI.