El gobierno argentino y dirigentes del oficialismo y distintos partidos de la oposición repudiaron hoy la actitud de partidarios del ex presidente del Brasil, Jair Bolsonaro, que ocuparon en Brasilia las instalaciones del Congreso y del Supremo Tribunal Federal, equivalente a la Corte Suprema de Justicia, al tiempo que insistían con no reconocer el triunfo electoral y la Presidencia de Luiz Inácio Lula da Silva y en reclamar una intervención militar.
«La democracia es el único sistema político que garantiza libertades y nos obliga a respetar el veredicto popular», sostuvo el presidente Alberto Fernández, quien en su cuenta de Twitter agregó: «Demostremos con firmeza y unidad nuestra total adhesión al Gobierno elegido democráticamente por los brasileños que encabeza el presidente Lula. Estamos junto al pueblo brasileño para defender la democracia y no permitir nunca más el regreso de los fantasmas golpistas que la derecha promueve».
«Como presidente de la CELAC y del Mercosur, pongo en alerta a los países miembros para que nos unamos en esta inaceptable reacción antidemocrática que intenta imponerse en Brasil», manifestó.
El jefe de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, Horacio Rodríguez Larreta, expresó su «profunda preocupación por el asalto a las instituciones de la democracia en Brasil», así como su «condena absoluta a la acción violenta» y su «total solidaridad y apoyo a Lula».
«Frente a las acciones golpistas de la derecha en Brasil, manifestamos nuestra solidaridad con Lula y alzamos la voz en defensa de la democracia brasileña», dijo el canciller Santiago Cafiero.
El ministro de Economía, Sergio Massa, repudió «enérgicamente los actos de violencia y el asalto a las instituciones democráticas en Brasil. Hechos como estos atentan contra la democracia y la voluntad popular» y expresó su «total apoyo a Lula» y su «solidaridad para con el gobierno y el pueblo brasileño».
«Expreso mi más enérgico repudio a los actos de violencia institucional que se están llevando adelante en Brasilia contra los tres poderes. Confío en la experiencia del presidente Lula, quien restablecerá el orden democrático», indicó el embajador argentino en Brasil, Daniel Scioli.
Enfático, el ex embajador en Brasil, Diego Guelar, escribió en redes sociales: «Este BURDO intento de GOLPE de ESTADO no pasara !!!! Las Instituciones en Brasil son mas solidas que una BANDA de FANATICOS TRASNOCHADOS .Invasión violenta de partidarios de Bolsonaro en las sedes de los tres poderes en Brasil: ‘intento de golpe de Estado'».
«Tarados intolerantes», fue la expresión utilizada por el diputado José Luis Espert, quien reclamó «cárcel o bala» para los autores de la ocupación del Congreso brasileño.
El senador radical Martín Lousteau expresó su «repudio absoluto al ataque a las instituciones de Brasil», así como su «apoyo al presidente Lula y al pueblo brasileño en este ataque a la democracia».
«Nuestro enérgico repudio al acto golpista de los bolsonaristas que han tomado el Congreso de Brasil», dijo el diputado del Frente de Izquierda y los Trabajadores, Nicolás del Caño.
El ex canciller Jorge Faurie manifestó el «rechazo y condena absoluta a los agitadores populistas -presuntamente seguidores bolsonaristas- que atacan y ocupan hoy el Palacio de Gobierno y la Corte Suprema del Brasil, en un claro ataque a la democracia de ese país. Unámonos en defensa de la Democracia en nuestra región, amenazada por extremismos – de derecha o de izquierda – ; toda nuestra solidaridad con los brasileños en esta hora crítica !!»
«Lo que está pasando en Brasil es muy grave. Desde Juntos por el Cambio siempre vamos a estar en contra de la violencia, porque sin democracia no hay libertad», manifestó el diputado del PRO, Cristian Ritondo.