BUENOS AIRES (ANP) Diputados de Unión por la Patria, radicales, de Encuentro Federal, y provinciales salieron al cruce a la convocatoria de la diputada del PRO, Marilú Quiroz, de hacer una reunión en la que se critica el uso de las vacunas.
El titular de la Comisión de Salud Pública, el peronista Pablo Yedlin, le presentó una nota al titular de la Cámara Baja, Martín Menem, en la que asegura que la reunión convocada por Quiroz “constituye un dispositivo de desinformación sanitaria de carácter, incompatible con los compromisos del Congreso”.
Yedlin, manifestó su preocupación, y la de otros legisladores, por una “actividad antivacunas” que organiza la diputada Quiroz. En tal sentido, el legislador de Unión por la Patria exigió la suspensión del evento y cargó: “La ‘anticiencia’ no puede tener lugar en un país serio”.
La nota presentada ante Menem lleva la firma del propio Yedlin, de su compañero de bancada, Daniel Gollán, junto a las de Carla Carrizo de Democracia para Siempre (radical); Mónica Fein de Encuentro Federal; de María Montoto, del Frente Cívico de Santiago del Estero.
Quiroz (foto), aliada al Gobierno, propuso una reunión bajo el nombre “¿Qué contienen realmente las vacunas?”, convocado para el próximo 20 de octubre a las 9.00 en el Auditorio del Anexo A del Palacio Legislativo, en la cual están invitados a exponer Augusto Roux, Lorena Dibiasi, Oscar Botta, a Viviana Lens, y Xavier Huelmo, entre otros.
Botta -miembro de la organización internacional Médicos por la Verdad-disertará sobre “Vacunas de calendario y autismo”, a cargo del médico Oscar Botta, y Lenns sobre “Víctimas ignoradas por el Estado: sangre de vacunados al microscopio”.
Médicos por la Verdad fue denunciada por difundir información falsa sobre la Covid-19. En 2020, el Consejo General de Colegios Oficiales de Médicos de España abrió un expediente contra la organización por violar el Código Deontológico y generar alarma social, al negar la pandemia y rechazar medidas básicas de prevención.
En su reclamo, Yedlin señaló que “el enfoque difundido constituye un dispositivo de desinformación sanitaria de carácter, incompatible con los compromisos del Congreso y del Estado Nacional de promover políticas de salud pública basadas en evidencia”.
Luego, explicó que “la realización de jornadas de esta naturaleza en espacios oficiales puede erosionar la confianza en las vacunas, el Calendario Nacional de Vacunación, política de Estado garantizada por la Ley 27.491 -control de enfermedades prevenibles por vacunación- y reducir coberturas y, por ende, incrementar el riesgo de brotes de enfermedades prevenibles”.
