Buenos Aires, dic 17 (ANP).- El sector público nacional tuvo en noviembre un desborde en el gasto que derivó en un significativo aumento del déficit fiscal, con subas interanuales del 203,1% en el financiero y del 335,6% en el primario, de acuerdo con el adelanto informado por la Oficina de Presupuesto del Congreso (OPC).
Si bien los ingresos totales alcanzaron a $656.742 millones y tuvieron un incremento nominal del 62,4% y real del 7,4%, el gasto tuvo un aumento mayor, por lo que se agravó la situación deficitaria de la Administración Nacional.
En ese sentido, el gasto primario fue el mes pasado de $1.061.767 millones, con un alza en los doce meses transcurridos del 113,5% nominal y 41,2% real, en tanto los gastos totales alcanzaron a $1.157.920 millones, con una suba nominal del 103,3% y real de 34,4$.
De esta manera, el déficit financiero de noviembre fue de $501.179 millones, con un crecimiento nominal del 203,1% y real del 100,5%, mientras el déficit primario ascendió a $405.025 millones, lo que representa un alza nominal del 335,6% y real del 188,1%.
Según la OPC, la dinámica del gasto total “estuvo marcada por la expansión de los gastos de capital 497,3% (803% nominal) y en particular de las transferencias, que se multiplicaron más de 10 veces en términos reales, principalmente por las efectuadas a fondos fiduciarios y empresas públicas”.
“Por su parte, los gastos corrientes primarios crecieron 11,1%, destacándose las transferencias a provincias, los gastos de funcionamiento y los subsidios energéticos, con variaciones de 50,7%, 28,3% y 27%, respectivamente”, siempre en términos reales.
La OPC agregó que dentro de las prestaciones sociales (3% real) “se destaca la variación positiva de las asignaciones familiares (32,1%), que más que compensó la reducción de los programas asociados a la fórmula de movilidad”.
En cuanto al pago de los intereses de la deuda, se registró una disminución de 12,1%, lo que moderó el crecimiento de los gastos totales (33,4%).
En el acumulado al 30 de noviembre, los gastos totales alcanzaron $9.119.660 millones, equivalentes al 83% del
crédito presupuestario vigente.
Por sobre ese porcentaje se anotaron los intereses de la deuda (94,8%), los subsidios energéticos (87,1%) y las asignaciones familiares y por hijo (86,8%), ubicándose en el otro extremo la inversión real directa (68,4%).
En cuanto a los gastos vinculados a la pandemia por COVID-19, se devengaron alrededor de $414.813 millones, equivalentes al 84,8% del presupuesto asignado.
Por su parte, las partidas financiadas con el Aporte Solidario y Extraordinario alcanzaron $145.718 millones, lo que implicó el 71,2% de su crédito vigente.