BUENOS AIRES (ANP).- El director de la Agencia de Recaudación bonaerense, Cristian Girard, defendió la decisión de la provincia de aplicar un fuerte aumento al impuesto inmobiliario rural debido al contexto de alta inflación, y aclaró que los tributos patrimoniales en Buenos Aires se incrementaron por debajo del IPC.
En declaraciones a Radio Mitre, el titular de ARBA atribuyó el impacto de los ajustes en los impuestos a que los montos se están comparando con lo que se pagó en 2023, cuando se había declarado la emergencia por la sequía.
«Claramente los incrementos son grandes en virtud del contexto inflacionario que estamos viviendo, pero si uno compara lo que paga cualquier cosa hoy en marzo o en febrero con lo que pagaba hace un año, el aumento es abismal y escandaloso», señaló.
En este sentido, insistió en que la suba dispuesta por el gobierno de Axel Kicillof «no es un impuestazo» y aseguró que los impuestos patrimoniales de la provincia —patente, inmobiliario urbano e inmobiliario rural— «se incrementaron por debajo de la inflación para gran parte de los propietarios».
Girard opinó que lo que ocurre es que los aumentos de impuestos se dieron en un contexto general complejo, provocando el descontento de los contribuyentes, y sostuvo que hasta ahora no ha tenido noticias de casos de productores que hayan recibido boletas con aumentos de 300% a 800%.
Asimismo, indicó que mantuvo reuniones con Nicolás Pino, presidente de la Sociedad Rural, y con Horacio Salaberry, titular de la Confederación de Asociaciones Rurales de Buenos Aires y La Pampa, para «atender casos y darle devolución en caso de que hubiera errores en las decisiones», manifestó.