BUENOS AIRES (ANP).- El rechazo del DNU impulsado por el Gobierno —el primero en la historia argentina que recibe un revés parlamentario— impactó no solo en el presidente Javier Milei y su entorno sino también en la Unión Cívica Radical, un espacio que viene profundizando su interna por el apoyo de algunos de sus legisladores a las revolucionarias propuestas del mandatario libertario.
El presidente de la UCR y senador por la Ciudad de Buenos Aires, Martín Lousteau, volvió a marcar ayer sus diferencias con las propuestas libertarias, al parecer irreconciliables, con su voto en contra, aunque el comunicado publicado hoy por el partido con la firma de varios gobernadores manifestó un amplio apoyo al Gobierno, aún cuando le reclamó que busque el consenso.
En su cuenta de X, Lousteau defendió hoy su postura y explicó que votó en contra del DNU «porque es inconstitucional», pero también porque considera a Milei «un presidente insensible».
«Entre las prepagas y las familias elige a las prepagas; entre los laboratorios y los jubilados elige a los laboratorios; y entre las petroleras y el trabajador elige a las petroleras», desafió el senador de CABA.
La pelea en Diputados
Ahora, la pelea final tendrá lugar en la Cámara de Diputados, la que podría dejar firme el DNU si le da luz verde. Al respecto, el diputado nacional radical Francisco Monti expresó sus argumentos a favor del DNU que ahora deberá ir a la Cámara de Diputados, y justificó su posición favorable en la necesidad de avanzar con las reformas que requiere el país.
En diálogo con el programa CNN Primera Mañana, Monti aseguró que el resultado negativo de ayer en el Senado «es un fracaso parcial» ya que todavía queda la instancia de la cámara baja, por lo cual enfatizó que «este partido no está terminado», si bien reconoció que «a veces uno ve fallas notables en la praxis política y parlamentaria».
En este sentido, subrayó también que la previsible derrota en la cámara alta enfrenta al Gobierno de Javier Milei con la evidencia de que «debe tomar más en serio las agendas políticas y trabajar con rigurosidad» para que las reformas sean aprobadas.
Respecto al principal motivo del rechazo en el Senado, que fue la inconstitucionalidad del decreto, Monti argumentó tener «un contrapunto con esta mirada, la Constitución Nacional no es una letra muerta escrita en una tierra sagrada sino que es un organismo vivo, en donde la praxis también cuenta».
En opinión del legislador, hubo requisitos que fueron tomados «con cierta laxitud» en el proceso del decreto de necesidad y urgencia, pero que «esto no deriva en una inconstitucionalidad, sino en una invalidez si es que los legisladores lo desean».
Para Monti, el DNU plantea una reforma laboral «muy valiosa», una desregulación del mercado de la aeronavegación comercial, una modificación de la legislación de alquileres «que aumentó exponencialmente la oferta de alquileres » y la eliminación de reglamentaciones obsoletas que no tienen ningún sentido continuarlas como la Ley de Góndolas o de Abastecimiento.
Por último, Monti se refirió al comunicado publicado por los gobernadores radicales, que pidieron que las reformas sean frutos del consenso y que el presidente no se extienda en la narrativa electoral, pero en el que también comulgan con todas las reformas que pretende instalar el Gobierno.
«En líneas generales, estamos bastante a favor de las reformas que plantea el DNU e incluso formaron parte de nuestra plataforma de gobierno. La CGT, que es la verdadera perjudicada en este DNU, fue la responsable de la caída de los gobiernos de la UCR; y no estamos a favor de seguir alimentando a estas corporaciones», indicó Monti.