Buenos Aires, (ANP) – El mercado le asigna alta probabilidad de que en 2024 el gobierno trate de establecer un desdoblamiento cambiario con el fin de ir ordenando la multiplicidad de precios que tiene la divisa norteamericana.
Así lo señala Juan Pedro Mazza, estratega de Cohen Argentina: «Con la brecha al 150% y la inflación corriendo por encima de los dos dígitos, una unificación cambiaria como la de 2015 es demasiado arriesgada. Sin reservas netas y con un Congreso atomizado, la dolarización de corto plazo es imposible. Así, todo indica que conviviremos con la brecha en 2024 y un desdoblamiento formal del tipo de cambio luce cada vez más probable».
Mazza indica que «un desdoblamiento es un esquema en el cual conviven un tipo de cambio comercial ‘bajo’ para operaciones de comercio exterior y un tipo de cambio financiero ‘alto’ por el cual se cursan libremente el resto de las operaciones».
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«A valores actuales, el comercial sería el dólar oficial que cotiza a $350, mientras que el financiero sería el dólar MEP, que cotiza a $873. Este esquema transitorio apunta a una unificación cambiaria gradual de mediano plazo, donde, con el tiempo, el dólar financiero converja al comercial sin necesidad de una gran corrección cambiaria inicial», señala el economista.
En ese sentido, advierte que «es crucial destacar que este sistema no eliminaría las presiones devaluatorias» y que «para que sea sostenible, es necesario una corrección inicial en el tipo de cambio comercial, llevándolo a un nivel competitivo que reduzca la brecha y permita acumular reservas».
«Este nivel debe ser sostenido en el tiempo y no atrasarse significativamente con respecto a la inflación», explicó Mazza.
¿Qué pasaría entonces con un desdoblamiento?
«Bajo nuestro escenario de desdoblamiento, en diciembre ocurre un salto en el tipo de cambio de 50%, que hace regresar al tipo de cambio real a los niveles posteriores a las PASO. Este salto cambiario tendrá un rápido traslado a precios vía pass-through y empujará al gobierno a sostener un ritmo de devaluación elevado para no perder demasiada competitividad comercial. En este marco, la inflación se mantendrá elevada, cerca del 10% mensual en promedio, y cerrará 2024 en torno al 175%», anticipa el reporte.
El reporte agrega: «Así, esperamos una ganancia en el tipo de cambio real muy por debajo de la que está implícita en los precios de mercado de los bonos CER y DLK: de 15% contra 24% para el primer semestre de 2024, de 9% contra 27% a septiembre de 2024 y de 9% contra 14% para principios de 2025. En otras palabras, los bonos CER lucen baratos y un desdoblamiento cambiario todavía no está en precios de mercado», indica el analista.