Buenos Aires, feb 21 (ANP)- La producción de las pymes industriales tuvo en enero un crecimiento interanual del 0,3% y completó así el segundo mes consecutivo de nivel positivo, de acuerdo con el último informe de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME).
“Si bien la recuperación viene siendo muy lenta, es positivo que al menos en el promedio general, haya dejado de caer”, destacó la entidad, que además advirtió sobre la existencia de “mucha divergencia entre la situación de cada empresa, incluso dentro de un mismo sector”.
En ese sentido, señaló que de los 11 grandes sectores relevados, seis tuvieron aumentos anuales, uno se mantuvo sin cambios y seis finalizaron con bajas.
El rubro de mayor progreso anual fue Equipos Eléctricos, aparatos e instrumentos, con un incremento de 10,7%, con “menor ingreso de productos importados y cierto efecto incipiente de sustitución de importaciones”.
En el otro extremo, la mayor caída anual fue en Calzado y Marroquinería (-10,9%), al que “le está costando mucho despegar por la baja demanda escolar y el menor uso de calzado durante el año pasado, cuando la cuarentena redujo tanto la circulación de gente en las calles como los eventos”.
Los rubros vinculados al agro vienen mostrando un mejor desarrollo, como los casos de carrocerías, acoplados y semiacoplados
“También viene creciendo significativamente la fabricación de motos, un ramo donde aumentó mucho la demanda con la cuarentena”, señaló CAME, que precisó que el bloque de Material de Transporte tuvo un alza anual de 3,8%.
En el bloque Minerales no metálicos (+2%), el rubro que más subió fue el vinculado a materiales para la construcción, que viene moviéndose firmemente “como buen refugio para dolarizar ahorros y la reactivación de la obra pública”, añadió.
CAME destacó como “algunos de los factores que preocupan a los industriales” a “los incrementos de precios de los insumos y las dificultades para trasladarlos luego al precio de venta”, así como “la debilidad financiera en la cual quedaron tras el difícil 2020 que obliga a vender cheques anticipadamente o liquidar stocks con la pérdida que eso implica”.
Por último, las pymes industriales expresaron su preocupación por “la complicación para pagar salarios sin ayuda del Estado o la extensión de los plazos de entrega de insumos”.
CAME destacó como “algunos de los factores que preocupan a los industriales” a “los incrementos de precios de los insumos y las dificultades para trasladarlos luego al precio de venta”, así como “la debilidad financiera en la cual quedaron tras el difícil 2020 que obliga a vender cheques anticipadamente o liquidar stocks con la pérdida que eso implica”.
Por último, las pymes industriales expresaron su preocupación por “la complicación para pagar salarios sin ayuda del Estado o la extensión de los plazos de entrega de insumos”.