Buenos Aires, ene 11 (ANP) – Un estudio de la Sociedad Rural Argentina (SRA) revela que el Estado se queda con el 90% de la rentabilidad de los productores, debido a la alta presión fiscal. El estudio toma en cuenta los últimos ajustes impuestos por Macri y el incremento de impuestos provinciales.

Cultivos de invierno: afectados por cuestiones climáticas y los cambios de reglas de juego al momento de la cosecha Trigo: El cambio de reglas de juego encontró al productor con las decisiones de inversión ya tomadas. El productor al momento de sembrar estimó que los impuestos representarían un 88% de su resultado, y luego del cambio de reglas de juego, el peso de los impuestos pasó al 97%. Esto significa que para los que vendieron sus granos luego de cambio impositivo, los aumentos de impuestos le redujeron su resultado económico un 75%. Lo mismo le pasó al resto de los cultivos de invierno, como la cebada.

Cultivos de verano: en el caso de los cultivos de siembra temprana, los cambios impositivos cayeron, al igual que en el trigo, cuando los cultivos ya estaban sembrados, mientras que, para los cultivos de siembra tardía, el productor en algunas zonas ha tenido la posibilidad de adecuar su decisión de inversión al nuevo contexto. Soja: El peso de los impuestos en el resultado del productor pasó de 87% en septiembre de 2019 a 94% en diciembre de 2019. Esto significa que, para los productores que vendan sus granos luego de los cambios impositivos, su resultado económico se verá reducido en un 54%, un poco menos de la mitad del resultado que esperaba cuando sembró. Maíz: El peso de los impuestos en el resultado del productor pasó de 81% en septiembre de 2019 a 94% en diciembre de 2019. Esto significa que, para los productores que vendan sus granos luego de los cambios impositivos, su resultado económico se verá reducido en un 68%, casi dos tercios del resultado que esperaba cuando sembró. Girasol: El peso de los impuestos en el resultado del productor pasó de 85% en septiembre de 2019 a 97% en diciembre de 2019. Esto significa que para los productores que vendan sus granos luego de los cambios impositivos su resultado económico se verá reducido en un 80%, por causa de los impuestos su resultado será tan solo una quinta parte de lo que estimaba obtener cuando decidió llevar adelante la siembra.

El reporte tiene en cuenta modificaciones que se producen en los impuestos entre el momento en que el productor planifica su negocio y decide la siembra, hasta la cosecha.

Causas del aumento de la presión tributaria:

Retenciones: Pasaron de 7% a 12% en caso de granos (maíz, trigo, girasol, cebada, sorgo, etc). Esto representa un aumento de la alícuota del 71%. En el caso de la soja, pasó de un derecho de exportación esperado para la próxima campaña del 25% a uno de 30%, lo que representa un aumento del 20% en su alícuota.

El impuesto inmobiliario y tasas viales: Este impuesto provincial en el último año aumentó en promedio más de un 55% según la provincia. Lo mismo ocurrió con las tasas viales que recaudan los municipios.

Postergación de cronograma reducción de alícuotas de Ingresos Brutos y Sellos: Según el cronograma del consenso fiscal en 2020, la actividad agropecuaria pasaba a estar exenta.

Por NP