BUENOS AIRES, JUN 19 (ANP) – Siete de cada 10 pymes de menos de 800 empleados enfrentan incrementos de costos derivados de la pandemia, como es el traslado de personal o acuerdos de suspensión de empleados, que no se pueden compensar con incrementos de productividad. El resultado es un traslado a los precios.

Así lo indica un informe del Observatorio Pyme, la entidad de la Universidad de Bologna vinculada a la UIA que desde hace mas de 30 años realiza un detallado seguimiento de las pequeñas y medianas empresas.

«El 77% de las empresas afronta costos adicionales derivados de la situación sanitaria. En particular, el 40% del segmento incurre en gastos extraordinarios por licencias y acuerdos de suspensión. El efecto inmediato es la restricción de oferta e intentos de traslado a precios de los mayores costos», dice el reporte de la entidad.

El trabajo trata de poner en números el efecto que provoca entre las empresas los mayores gastos en los que tienen que incurrir para poder seguir operando en medio de la crisis sanitaria. Solo una porción de las pymes ha podido, según señala el trabajo, compensar mediante un incremento de la productividad. El problema que enfrentan es que ante ese contexto, las firmas comienzan a restringir la oferta. No sería un problema la demanda.

«A pesar de la reactivación productiva que se observa desde el tercer trimestre de 2020, el 33% de las empresas de menos de 800 ocupados de todos los sectores económicos aún permanece en estado de operatividad parcial, básicamente por la inactividad de parte de su personal debido al respeto de los protocolos sanitarios, la insuficiencia de capital de trabajo y la indisponibilidad de algunos insumos».

Si se tomara en cuenta el principio de que la inflación es «multicausal», como dice el gobierno, en este caso se podría afirmar que en parte el aumento de los precios no se debería a una demanda «sobrecalentada» sino por una oferta insuficiente.

«Existe una estrecha relación entre grado de operatividad y nivel de producción: las empresas totalmente operativas se han situado en un nivel de producción superior (+2%) al de prepandemia. Por el contrario, aquellas empresas que operan solo parcialmente han producido casi un tercio menos (-28%) que en la prepandemia».

De acuerdo con el estudio, solo el 20% logró en el actual contexto mejorar sus niveles de productividad para evitar el traslado a precios.

«La consolidación de la reactivación depende de que se superen dichos límites de oferta y que cada vez más empresas puedan pasar del estado de operatividad parcial al estado de operatividad total».