BUENOS AIRES (ANP).- El mensaje del presidente ruso Vladimir Putin sobre la guerra de Ucrania es sumamente claro: lo que no se obtiene en la mesa de negociaciones se consigue en el campo de batalla.

Por eso, seis días después de reunirse con el presidente estadounidense Donald Trump en Alaska, Rusia lanzó el jueves uno de los peores ataques contra el oeste ucraniano, una región en donde Moscú cree que los aliados europeos le proporcionan material bélico a Kiev.

Después del optimismo desatado hace una semana en Anchorage, se vive un clima de incertidumbre y el magnate estadounidense está pensando si abandona su mediación para conseguir un acuerdo de paz entre Moscú y Kiev, según informes del diario Usa-Today.

El lunes, seis líderes europeos, entre ellos el jefe de Gobierno de Alemania, Friedrich Merz, y el presidente francés, Emmanuel Macron, se reunieron en la Casa Blanca con Trump para analizar las conversaciones mantenidas con el presidente ruso, sin lograr ningún avance concreto.

En las últimas horas, Moscú insistió en que debe formar parte de negociaciones sobre los mecanismos para garantizar la futura Ucrania. De todas maneras, el gobierno ruso dijo que está dispuesto a mantener una reunión bilateral con el presidente Volodimir Zelenski.

Eso sí, antes de que eso ocurra deben resolverse si el actual mandatario ucraniano tiene la “autoridad suficiente” para firmar un acuerdo que ponga fin a la guerra, opinó el ministro de Relaciones Exteriores ruso, Serguei Lavrov.

Rusia sigue reclamando elecciones en el ex satélite soviético, ya que Zelenski finalizó su mandato de cinco años el 20 de mayo de 2024.

El 21 de abril de 2019, el actual jefe de Estado, de 47 años, un actor sin experiencia política con estudios en derecho, ganó el ballotage con el 73,22% de los votos, derrotando al presidente Petro Poroshenko (2014-2019), un multimillonario pro-occidental y nacionalista.

Putin, por su parte, fue reelegido para un tercer mandato consecutivo (lleva cinco) en marzo de 2024, con el 88% de los votos, en unas elecciones cuestionadas por la oposición y los principales países de Occidente.

Tras su reunión con Trump, el líder del Kremlin exige que Kiev renuncie a la península de Crimea, ocupada por Moscú en marzo de 2014, entregue todo el Donbass, una región rica del este ucraniano, renuncie a unirse a la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) y mantenga a las tropas occidentales fuera de ese país.

Pero, en las últimas horas, la Casa Blanca cambió de opinión. El mandatario estadounidense, que había intimado a Zelenski a aceptar un acuerdo debido a la superioridad militar de Rusia, esta semana alentó a Kiev a atacar Moscú, porque dijo que es muy difícil ganar una guerra sin embestir contra el invasor.

“Que Trump consintiera a Putin (durante la cumbre) no fue ninguna sorpresa. La envidia del presidente hacia los autócratas como el mandatario ruso y sus propios instintos autoritarios están bien establecidos” dijo Steward Patrick, analista de la Fundación Carnegie para la paz Internacional.

En un artículo titulado, “Un mundo inseguro para la democracia”, el experto en historia advirtió que “la postura cínica de Trump promete remodelar el orden global, acelerando el multilateralismo no liberal”.

Por su parte, el analista suizo Ralph Bosshard afirmó que Zelenski debe comprender que tendrá que abandonar Kiev si se realizan elecciones presidenciales en ese país de Europa del este.

«Está en desventaja porque pierde territorio cada día. Si no se apresura, la cuestión de la retirada de las tropas ucranianas del noroeste de la región de Donetsk se convertirá en una cuestión teórica, porque entonces la línea de contacto podría coincidir con la frontera administrativa», dijo Bosshard, al ser consultado por la agencia rusa de noticias Sputnik.

Otro asunto que aún no está definido es dónde se reunirá Zelenski con Putin, ya que el jefe de Estado ruso afronta un pedido de arresto de la Corte Penal Internacional (CPI), por supuestos crímenes de guerra a raíz de la deportación ilegal de niños ucranianos a Rusia.

Según la CPI, las acciones se cometieron a partir del 24 de febrero de 2022, día de la invasión rusa. Por ese motivo, el líder del Kremlin, de 75 años, corre el riesgo de ser arrestado en cualquiera de los 125 estados que forman parte de ese organismo jurídico, que no reconoce ni Estados Unidos ni Israel.

Zelenski, por otra parte, dijo que solo concurrirá a una cumbre con el líder del Kremlin si Kiev obtiene algunas garantías de seguridad. Además, sugirió que la trascendental reunión se realice en un país neutral como Suiza, Austria o Turquía, bajo la mediación de Washington.

Lo cierto es que, a una semana de la cumbre entre Estados Unidos y Rusia, Moscú continúa bombardeando Ucrania con una lluvia de misiles y drones.

Por eso, pese a los esfuerzos diplomáticos. la posibilidad de lograr un alto el fuego o un acuerdo de paz sigue siendo un problema insoluble.

Por NP