BUENOS AIRES (ANP) La expectativa oficial de cerrar febrero con una inflación «más cercana al 10% que al 20%» parecen correr el riesgo de no cumplirse por un escaso margen, si se tienen en cuenta las primeras estimaciones privadas que dan cuenta de un índice que se ubicaría levemente por encima del 16%.
Así lo hicieron conocer hoy la consultora C&T y la Fundación Libertad y Progreso (LyP), que proyectaron (en el primer caso para el Gran Buenos Aires) un alza en los precios al consumidor en el mes que finaliza del 16,3% y 16,8%, respectivamente.
En cuanto a la inflación interanual, la entidad dirigida por María Castiglioni y Camilo Tiscorni la ubicó en un 275%, «la mayor desde marzo de 1991», el mes previo al inicio de la Convertibilidad, mientras que LyP la estimó un un 288%.
«Los fuertes ajustes en diversos precios regulados explicaron gran parte del comportamiento del mes», indicó C&T, que explicó que «el alza del transporte público provocó que el rubro de transporte aumentara 47% mensual», en tanto «el ajuste en la electricidad que se implementó a mitad de mes se combinó con un significativo incremento en el sueldo de encargados de edificio para generar una variación de 38% mensual en el rubro vivienda».
Salud trepó 23% mensual con gran incidencia de las prepagas, ya que los medicamentos se moderaron notablemente al crecer 10% y en Bienes y servicios varios se destacaron los cigarrillos con un alza de 26%.
C&T agregó que «Alimentos y bebidas, el rubro de mayor incidencia, aumentó significativamente por debajo del promedio: 11%. Hubo moderaciones muy importantes en varios rubros relevantes de alimentos, como carnes, panificados y aceites y grasas, y por el contrario, una aceleración muy fuerte en las frutas. No obstante, dichas moderaciones tuvieron lugar, sobre todo, entre fines de enero y principios de febrero; en las semanas siguientes se verificó un mayor ritmo de aumento».
LyP precisó que «la primera semana de febrero presentó una variación sustancialmente alta, debido a la actualización de tarifas en el transporte público del AMBA», pero a partir de la segunda semana del mes, «los datos convergieron a variaciones en el rango del 2%-3% semanal, manteniendo la tendencia de la última quincena de enero y ubicándose en valores similares a los de septiembre del 2023».
Por su parte, C&T consideró que la dinámica de precios de febrero, más el ajuste en las tarifas de electricidad, dejan «un arrastre estadístico de cerca de 3% para marzo, mes en el que los ajustes de educación tendrán un peso significativo y a los que puede sumarse un incremento en el gas. Estimamos que la inflación de marzo podría rondar el 15% mensual», en un análisis coincidente con el del LyP en ambos guarismos
«Si bien las subas de precios estacionales y de regulados jugará en contra, estimamos que la vigencia del ancla cambiaria y la política monetaria contractiva que está llevando adelante el Banco Central de la República Argentina (BCRA) más que compensará este efecto, por lo que el IPC tendrá una variación levemente menor a la del segundo mes del año», señaló la entidad dirigida por Aldo Abram.
Al respecto, C&T destacó que «en el interior del país no se dieron aumentos de servicios públicos de magnitud similar a los que tuvieron lugar en el GBA durante febrero. Por ello, puede esperarse una menor inflación en el resto del país, que derive en que la inflación nacional pueda quedar debajo del valor de GBA durante este mes».