Las reservas internacionales del Banco Central finalizaron noviembre con un nivel provisorio de US$ 38.005 millones y cayeron US$ 671 millones a lo largo del mes, a pesar de la remontada en los últimos tres días, en los que por efecto de la implantación de la segunda versión del «Dólar Soja» tuvieron una recuperación de US$ 467 millones.
La preocupación del equipo económico encabezado por el ministro Sergio Massa de no alcanzar el nivel necesario de reservas netas para cumplir con las metas corregidas del acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI) llevó a relanzar el Programa de Incremento Exportador, esta vez con vigencia hasta fin de 2022, con la esperanza de reeditar el buen desempeño que la iniciativa tuvo en septiembre.
De todas maneras, la medida tiene su lado oscuro en tanto representa un adelanto de liquidaciones de exportaciones y, por consiguiente, una vez finalizada su vigencia los ingresos de divisas pueden caer más de lo previsto, como ocurrió en octubre y las primeras tres semanas de noviembre.
En el balance de los once meses de 2022, las reservas muestran un descenso de US$ 1.657 millones, si la comparación se realiza contra el nivel recibido el 10 de diciembre de 2019 por el presidente Alberto Fernández, la baja es de US$ 5.780 millones y si se contrasta los valores actuales con los del récord de US$ 77.481 del 9 de abril de 2019, la caída es de US$ 39.476 millones.