Buenos Aires, feb 24 (ANP) – La Ley de Góndolas será uno de los temas que tratará la Cámara del Senado de la Nación en la sesión fijada para el próximo viernes 28 de febrero.
El proyecto –que contaba con la aprobación de Diputados desde noviembre pasado– logró pasar de manera exprés por las comisiones de la Cámara Alta tras contar con la aprobación del Frente de Todos y también con el aval de Juntos por el Cambio.
Allí, entre los senadores del oficialismo se pasó por alto el pedido para cursar invitaciones a referentes de los distintos sectores vinculados. Seguramente por la prioridad que la Casa Rosada le quiere dar a la Ley de Góndolas se desoyó cualquier pedido para escuchar a supermercadistas, empresarios pymes o grandes industrias. Quedó claro que la estrategia de Balcarce 50 no es incorporar modificaciones a lo aprobado en comisión del Senado al Expediente CD-53 Y 153/19 (Solo como dato de color, esta carpeta lleva un rótulo: Ley de Góndola).
Daniel Funes de Rioja, presidente de la Coordinadora de las Industrias de Productos Alimenticios (COPAL), rechazó la propuesta legislativa, un proyecto con el que el gobierno de Alberto Fernández quiere contar a partir del próximo viernes 28 en su escritorio.
El objeto de la Casa Rosada sin duda es, tras una pronta reglamentación por parte del Ministerio de Desarrollo Productivo, contar con una herramienta antiinflacionaria para floquear subas de precios en las góndolas.
“Este proyecto es anti supermercados. Es inaplicable y, desde el punto de vista práctico, traería más problemas que soluciones”, expresó el empresario, según se publicó en el portal iprofesional.
En la propuesta girada por Diputados, se plantea:
Los productos de una misma marca no podrán ocupar más del 30% del espacio en los expositores. La participación deberá involucrar a no menos de cinco proveedores o grupos empresariales.
Se reserva el 25% del espacio disponible en la góndola para productos elaborados por pymes inscriptas en el Registro de Mipymes y/o en el RENAF.
Un 5% adicional para los productos originados por la agricultura familiar, campesina o indígena, y también los sectores de la economía popular.
En las góndolas, los productos de menor precio no puede ser ubicados en sectores poco visibles.
En los exhibidores cercanos a las cajas, el 50% del espacio debe estar ocupado por productos elaborados por micro y pequeñas empresas, o cooperativas o mutuales.
Los rubros alcanzados por la norma, que pasó al Senado, son alimentos (donde se incluye a los lácteos), bebidas, productos de higiene personal y artículos de limpieza del hogar.
Luego de pasar por la Cámara Alta, la autoridad competente –en este caso el Poder Ejecutivo Nacional- deberá confeccionar el listado definitivo de los productos alcanzados en un lapso de 90 días de promulgada la ley en cuestión. En el caso de los productos importados, estos no podrán superar un determinado porcentaje que deberá ser establecido por la autoridad de aplicación. Para los productos de marcas licenciadas por un mismo grupo comercial o de empresas vinculadas o controladas por estos, serán considerados una única marca.