BUENOS AIRES (ANP).- El jueves próximo llega a Netflix una de las propuestas más esperadas, la adaptación del inmortal cuento de Edgar Allan Poe «La caída de la casa Usher», que sin duda sabrá capitalizar el éxito de dos clásicos versionados anteriormente por esa plataforma, «The haunting» y «Otra vuelta de tuerca».

El creador de esta nueva mirada a la familia Usher es Mike Flanagan, el mismo de las adaptaciones que ya fueron furor en Netflix. La primera, la novela de 1959 de Shirley Jackson, inspiró la serie «La maldición de Hill House», mientras que la segunda, la gran obra de Henry James, fue el punto de partida para estrenar «La maldición de Bly Manor».

Ahora, Flanagan vuelve a su fórmula de sacar a los oscuros personajes protagónicos de sus decadentes castillos de siglos remotos para traerlos al mundo actual, aunque hay que decir que el escenario y la época son lo menos del cambio.

Si en Hill House hubo personajes y giros dramáticos agregados para darle sazón al relato y, lógicamente, para extenderlo por varios capítulos, en este caso la historia plantea un viraje fuerte.

Para quienes amaron la vieja película de Vincent Price, hay que aclarar que, a juzgar por el trailer, ya no veremos a los desdichados hermanos Myrna y Roderick Usher deambulando lánguidamente entre los fantasmas de sus antepasados sino que podremos seguir de cerca las andanzas de los miembros de esta desquiciada familia en pleno, todos vivitos y coleando.

En el clásico, la catástrofe de los Usher no es rimbombante sino silenciosa. El clima de ese final inevitable es tenebroso pero al mismo tiempo intimista porque al relato le bastan solo tres personajes para pintar un cuadro insoportablemente agobiante, como si la casa familiar solo existiera en una dimensión exclusiva para estos condenados. Y esa es la magia del clásico: todo transcurre en la vieja casona, ninguno saldrá de allí con vida.

A juzgar por los avances, esto se pierde por completo en la nueva serie porque lejos de contar el epílogo de una estirpe maldita, la propuesta de Netflix arranca mostrándonos el inicio, el cómo y el por qué se cimentó la destrucción de una familia que transitó todos los caminos de la locura.

De todos modos, aunque lejana al clásico en que se inspira, la propuesta promete terror, intriga, muchos personajes capaces de todo, muertes a granel y una trama que no dará respiro.

Y para sumar atractivos, hay que destacar que otra vez es de la partida Henry Thomas, aquel adorable niño de «ET», que ya participó en los clásicos versionados anteriormente por Netflix en los papeles del padre de los Crain de Hill House y como el atormentado tío de los pequeños Wingrave de Bly Manor.

Por NP