Buenos Aires, may 22 (ANP)- El Consejo Agroindustrial Argentino (CAA) y la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME) se sumaron a las entidades que expresaron su rechazo a la decisión del Gobierno de suspender por treinta días las exportaciones de carne, tanto por considerar que la medida no repercutirá en una baja de los precios internos como por la dificultad para recuperar los mercados externos ante la competencia de otros países.
El CAA, integrado por más de medio centenar de agrupaciones, planteó su preocupación al ministro de Desarrollo Productivo, Matías Kulfas, a quien le indicaron que la medida “es marcadamente contraria a todos los objetivos plasmados en la agenda de trabajo” que la entidad conformada el año pasado “ha llevado a cabo con las distintas áreas de Gobierno en la búsqueda de desarrollar políticas de Estado que potencien la producción, agregado de valor y exportación de las cadenas agroindustriales, con carácter federal, inclusivo y sustentable”.
El Consejo estuvo representado en la reunión por el coordinador de la Mesa Nacional de Carnes y vicepresidente de CRA, Dardo Chiesa, el presidente del Consorcio ABC, Mario Ravetino, el titular de la Cámara Argentina de Feedlot, Juan Eiras, y el de la Unión de la Industria Cárnica Argentina (UNICA), Gustavo Valsangiacomo.
Por su parte, Kulfas estuvo secundado por la secretaria de Comercio Interior, Paula Español, a quienes muchos señalan como la “autora intelectual” de la medida.
En el encuentro, los representantes del CAA expresaron que comparten la preocupación por el nivel de inflación, “un hecho que perjudica a todos y en especial a quienes menos ingresos tienen”, pero señalaron al respecto que “el camino de las restricciones no es el adecuado” para controlar se problema.
Sobre el mismo tema, el sector de Economías Regionales de CAME alertó sobre la medida y objetó que “es recurrir a viejas recetas que, de antemano, sabemos que no funcionan”.
“Cerrarnos al mundo es restringir el crecimiento del sector productivo y atacar el empleo genuino”, aseguró Eduardo Rodríguez, titular del área.
Asimismo, la entidad aseguró que “el 8% de las exportaciones de carne vacuna proviene de las economías regionales, pero la preocupación no sólo reside en los productores del sector cárnico, sino en el sector agroindustrial en su conjunto”.
En ese sentido, puntualizó que “Argentina ha ido perdiendo competitividad, por lo que abrir nuevos mercados y/o mantenerlos es un trabajo y una inversión de años”.
“El riesgo es demasiado alto pero la prioridad pareciera estar en otro lado, pese a los dólares que necesita nuestro país y ante un alarmante nivel de pobreza”. lamentó.