BUENOS AIRES (ANP).- Afortunadamente, continúa el revival de las obras de Agatha Christie. Hace muy poco que el inglés Kenneth Branagh supo refrescar una de las mejores historia de la magistral autora dándole un giro sobrenatural a su última película, Cacería en Venecia, y ahora fue el turno del director mexicano José Manuel Craviotto, que estrenó recientemente en Netflix la producción Invitación a un asesinato.

¿Si es recomendable? Sí, y no. Mejor empezar por lo negativo porque es bastante poco y para nada insalvable. El tono de esta película no es de un misterio que vaya a tener a nadie al borde del asiento sino que apunta a un pasatiempo ameno  que haga digerible el encadenamiento de hechos trágicos  que desembocarán en una muerte previsible.

Quizás sea esa la principal diferencia con el espíritu de Agatha Christie, que el enigma no es tan hermético porque el espectador familiarizado con los casos policiales de la escritora podrá adivinar fácilmente desde el inicio quién morirá y quién es el responsable. Hasta aquí lo malo.

Sin embargo, Invitación a un asesinato es definitivamente recomendable porque el significado de esta muerte y la historia que la desencadenó sí es sorprendente. Salvo de la protagonista, aquí no hay que estar muy seguro de nadie. El malo quizás sea bueno en el final, el que parece bueno se descubrirá como siniestro, y el que se ve malo… probablemente sí sea muy malo. No hay garantías sobre lo que estas personas esconden en su mente y ese interrogante solo se sabrá al final.

Todo comienza cuando Ágata, una joven locutora amante de las historias policiales que ha logrado bastante éxito con sus podcast sobre crímenes enigmáticos, recibe una invitación de su hermana mayor, a la que no ve hace cinco años, para que viaje a la playa a compartir un agradable fin de semana en yate, donde hará un gran anuncio.

Una vez en la alejada mansión de la hermana, Ágata encontrará que también han sido invitados otros personajes —exmarido, exsocia y novio musculoso, examigo, y expareja— a los que se sumarán un ama de llaves afable y un misterioso jardinero. Y será en altamar, aislados, donde se produzca el crimen que tendrán que resolver para sanar las muchas heridas que todos cargan.

Probablemente los más exigentes quieran más cuota de acertijos y una resolución más compleja. Pero esa no es la intención de Invitación a un asesinato, donde los personajes mostrarán un costado más suave de las debilidades humanas.

En el elenco se destacan la española y siempre bella Maribel Verdú (Amantes, El laberinto del fauno, Belle epoque), Aarón Díaz (Betty en Nueva York) y Juan Pablo de Santiago (Bunker, Sitiados: México), que compone a un poco creíble pero adorable policía novato.

La protagonista es Regina Blandón, muy conocida por interpretar a Bibi en la exitosísima comedia mexicana La familia P. Luche, y la acompañan otras figuras como Manolo Cardona y el veterano Pedro Damián.

En suma, 92 minutos para distenderse y descifrar un enigma que nadie podrá resolver porque no hay un verdadero crimen donde el asesino nunca tuvo verdadera maldad.

 

Por NP