Buenos Aires, nov 9 (ANP).- La apreciación del tipo de cambio llegó a tal punto que en los diez meses transcurridos de 2021 la inflación duplicó el incremento del dólar mayorista, lo que abre el camino a un mayor nivel de depreciación después de las elecciones.
Así lo sostuvo hoy la Fundación Libertad y Progreso, que sostuvo que el nivel de apreciación del que se vale el gobierno como fallida ancla anti-inflacionaria “es insostenible”.
Diego Piccardo, economista de la entidad, precisó que en el acumulado del año “el tipo de cambio mayorista promedio mensual subió un 20,1% frente a una inflación interanual estimada del 41,3%”.
“En algún momento el Banco Central tendrá que elevar el ritmo de depreciación del tipo de cambio ya que las reservas son cada vez más escasas”, alertó, al tiempo que consideró que ante una probable devaluación, “la alternativa es un constante reforzamiento del cepo cambiario” y al respecto destacó que la última medida de la autoridad monetaria fue “limitar la compra de dólares a los bancos “.
También consideró que “otras opciones que tiene la autoridad monetaria es seguir limitando el uso de dólares para las importaciones”, aunque “a costa de una menor actividad económica”.
En ese contexto la Fundación proyectó una inflación de 3,2% para octubre, con un 41,3% en lo que va de 2021 y 51,7% en los últimos doce meses.
Al respecto, LyP señaló que “la inflación acumulada de 2021 es la segunda más grande de los últimos 5 años”, después del 42,2% de 2019, “como consecuencia de la devaluación luego de las PASO de aquel año”.
Para Piccardo, la principal preocupación del alto nivel de inflación de este año es que “se llegó a este punto con muchos precios pisados por el gobierno: tarifas de los servicios públicos; múltiples programas de controles de precios; naftas que arrancaron subiendo pero que terminaron atrasándose y como indica el manual electoral del kirchnerismo, el tipo de cambio”.
Por su parte, Aldo Abram director ejecutivo de LyP, indicó que “la baja de inflación que observamos en nuestro indicador con respecto a la oficial de septiembre es habitual en la estacionalidad en años que son normales y en los que la inflación no está escalando aceleradamente».
“Era lo esperable. Lo que podemos esperar es que aumente la inflación en noviembre y diciembre con respecto a octubre» advirtió.
Abram pronosticó que “a partir de diciembre el ritmo de suba del tipo de cambio mayorista comenzará a acelerarse” y eso “arrastrará el precio de los bienes que están en las góndolas” que hasta ahora “venían subiendo más moderadamente justamente por el atraso cambiario preelectoral que estaba generando el Banco Central».