Buenos Aires, mar 28 (ANP) El gobierno destinará a partir de abril unos $11.000 millones para devolverle a los empleados que cobran más de $150.000 los importes que ya le descontaron del impuesto a las Ganancias durante el primer trimestre. La idea es que el Senado ahora apure la sanción final del proyecto que en la madrugada del domingo fue aprobado por Diputados.

De acuerdo con fuentes oficiales, el costo fiscal final del proyecto será de $48.000 millones en el año, cuyo objetivo sería el de permitir reactivar el consumo en sectores de la clase media. Con la modificación introducida por la Cámara baja en el período 2021, serán 7 empleados por cada 100 que abonen el gravamen, mientras que hasta ahora lo hacía el 25%. Se trata de casi 1,2 millones de empleados en relación de dependencia y jubilados.

El tributarista Cesar Litvin afirmó que Diputados dio media sanción a los cambios en Ganancias al que calificó de “gran alivio pero transitorio” y agregó que “la situación de los autónomos  frente al impuesto es obscena”. “Los números cantan la violación a la garantía de igualdad ante la ley. Es insostenible que se mantenga este tratamiento”, señaló. En esa categoría, los contribuyentes empiezan a abonar el Impuesto a las Ganancias desde los $42.000.

Al respecto, en el oficialismo se prevé que el tratamiento de los autónomos se aborde de manera integral con las modificaciones del Monotributo. El proyecto del gobierno, elaborado desde la Adminsitración Federal de Ingresos Públicos (AFIP), que también obtuvo media sanción, prevé la creación de un nuevo régimen intermedio que amortigüe el salto que implica pasar del régimen simplificado al general. En ese nuevo esquema, los monotributistas de las categorías superiores -que están a punto de pasarse- tendrán mecanismos para acumular créditos fiscales para abordar los pagos de IVA cuando peguen el salto, al igual que en el caso del Impuesto a las Ganancias. 

Por su lado, el economista Sergio Chouza sostuvo que la sanción del proyecto “es el primer paso para corregir las distorsiones y mejorar los ingresos de más de 1.200.000 trabajadoras y trabajadores”

Entre los cambios más significativos de la ley figura la introducción de una fórmula de ajuste del piso del techo de $150.000. Se actualizará por el índice Remuneración Imponible de los Trabajadores Estables (RIPTE) . Pero no se cambió el Mínimo No Imponible (MNI) ni las tablas del Impuesto. Por ese efecto, un empleado y un jefe que gana por arriba de los $150.000 podrían terminar con un salario de bolsillo igual.