Buenos Aires, feb 19 (ANP).- El Fondo Monetario Internacional sostuvo hoy que la deuda de la Argentina es «insostenible» y llamó a avanzar en una operación «definitiva» para resolver el problema, que genere «una contribución apreciable» de los tenedores privados.
Al finalizar la misión de evaluación del programa de Argentina, que comenzó el pasado 12 de febrero en Buenos Aires, el FMI señaló en un comunicado que se enfatizó la necesidad de «continuar con un proceso colaborativo con los acreedores privados para maximizar su participación en la eventual operación de deuda».
A su vez, se indicó que las autoridades del organismo seguirán en diálogo permanente con el gobierno argentino y adelantó que durante la próxima reunión del G-20, que se llevará a cabo en Arabia Saudita a partir de este sábado, la directora gerente del FMI, Kristalina Georgieva, se reunirá con el ministro de Economía, Martín Guzmán.
En el comunicado final conocido esta tarde, el FMI calificó las reuniones con las autoridades argentinas como “muy productivas», y respaldó las políticas macroeconómicas que se están implementando para combatir la pobreza y la inflación, con fortalecimiento de los frentes fiscal y externo.
En este sentido, el Fondo consideró que el gobierno de Alberto Fernández «está actuando para resolver la difícil situación», pero admitió que la misión verificó un deterioro significativo en la capacidad del país de enfrentar el nivel y el servicio de su deuda pública, «en comparación con el último análisis de sostenibilidad de la deuda del FMI, publicado en julio de 2019, en el contexto de la Cuarta Revisión bajo el Acuerdo Stand-By».
«Nuestra visión es que el superávit primario que se necesitaría para reducir la deuda pública y las necesidades de financiamiento bruto a niveles consistentes con un riesgo de refinanciamiento manejable y un crecimiento del producto potencial satisfactorio no es económicamente ni políticamente factible», concluyó el organismo multilateral.
Dada este escenario negativo, el FMI instó a lanzar una operación de «deuda definitiva» para lograr el respaldo de los acreedores privados, continuando con «un proceso colaborativo» para que dichos tenedores maximicen su participación en una eventual oferta.
La misión de revisión de la Argentina estuvo liderada por Julie Kozack, subdirectora del Departamento del Hemisferio Occidental, y por Luis Cubeddu, Jefe de Misión para Argentina.