Buenos Aires, (ANP) – El Fondo Monetario Internacional (FMI) recomendó al gobierno argentino mejorar “la calidad, durabilidad y previsibilidad” del ancla fiscal, con la cual el equipo económico haa venido bajando la inflación y controlando el tipo de cambio.

“Para mantener el proceso de estabilización será necesario fortalecer el ancla fiscal, mediante mejorar su calidad, durabilidad y previsibilidad, mejorando el marco monetario y cambiario”, indicó el FMI en el Staff Report de la última revisión, conocido hoy.

Consideró el organismo que ello es necesario “para afianzar el proceso de desinflación y apoyar la acumulación de reservas y tomar medidas adicionales para eliminar obstáculos al crecimiento para apoyar la recuperación”.

“Garantizar una legislación fiscal y estructural clave, será

fundamental para la agenda de reformas, demostrando también una implicación política y social más amplia”, plantea el organismo.

La semana pasada se anunció la aprobación del ´último de los controles de programa acordado por el ex ministro de Economía Martín Guzmán en 2022 para refinanciar el préstamo stand by de u$s45.000 millones tomados por el ex presidente Mauricio Macri.

Eso implica que sin un nuevo acuerdo la Argentina va a tener que pagar desde el 2025 todos los vencimientos pactados por Guzmán. De ahí que se piense en un nuevo programa de asistencia, que podría incluir fondos frescos.

Según señalan los técnicos del FMI, el ministro Luis Caputo llevó a cabo hasta acá “un ajuste fiscal notable desde finales de diciembre con recortes del gasto real (26% interanual) que compensan con creces caídas de los ingresos reales (8 % interanual).

Con ello se produjo “un superávit global del 0,2% del PIB en los primeros cuatro meses de 2024”.

El Staff Report indica que “por el lado de los ingresos, el aumento de los impuestos especiales sobre el combustible, ingresos por exportaciones e impuestos temporales sobre el acceso a divisas para

Las importaciones (impuesto país) están ayudando a compensar parcialmente el descenso en los impuestos internos”.

“Se han realizado recortes de gastos a través de medidas bajo el control del Ejecutivo, que incluyen:

(i) recortes discrecionales en el gasto de capital y transferencias a las empresas estatales y las provincias, lo que obliga a realizar ajustes en todas estas entidades.

(ii) aumentos de tarifas de energía, transporte y agua

(iii) límites a los aumentos salariales públicos

(iv) estricta gestión de entidades públicas descentralizadas (por ejemplo, racionalización de fondos fiduciarios ineficientes), en línea con el recomendaciones de la Evaluación de la Gestión de la Inversión Pública (PIMA)”.

En ese sentido, los técnicos de FMI señal que “los fuertes esfuerzos fiscales y de financiamiento interno han reducido sustancialmente la deuda interna y el riesgo de default”.