Buenos Aires, oct 18 (ANP).- El propósito del secretario de Comercio Interior, Roberto Feletti, de conseguir atenuar la inflación mediante el control de precios de más de 1.200 productos de consumo masivo choca con una realidad marcada por el escaso éxito que esas medidas tuvieron en los comercios pequeños, ya que por lo general se concentran en las grandes cadenas de supermercados.
Al respecto, un estudio de la consultora Focus Market reveló que en el caso de los alimentos -el principal rubro a la hora de los controles y acuerdos de precios- el nivel de cumplimiento es del 97,4% en las grandes cadenas de supermercados, las más propensas a la firma de esos convenios y, por su grado de concentración, más fáciles de supervisar.
Pero ese grado de cumplimiento se derrumba al 15,4%, es decir seis veces menos, en el caso de los autoservicios y pequeños comercios de cercanía.
Esa diferencia se reflejó en los últimos doce meses en los distintos niveles de aumentos de precios, que hasta agosto de este año mostraron un alza interanual del 31,9% en las grandes cadenas y del 42,5% en los autoservicios.
«Mientras el consumo crece en grandes superficies comerciales no ocurre lo mismo en autoservicios nacionales, orientales o pequeños establecimientos de consumo masivo por que los accesos por parte del cliente a los acuerdos de precios son más limitados”, destacó al respecto el director de Focus Market, Damián Di Pace.
En ese sentido, puntualizó que “mientras el 30 % de las bocas comerciales pertenecen a las grandes cadenas de supermercados donde los acuerdos de precio están presentes, en el 70 % de los comercios restantes en todo el país donde se venden productos de consumo masivo la variación de precios es superior y la temperatura inflacionaria no tiene límites».
De acuerdo con el relevamiento realizado, los ítems incluidos en los programas oficiales concentran el 12% de la venta en las categorías que compiten en las grandes cadenas, logrando el mayor peso en Alimentos.
“Sin embargo al verificar el porcentaje de cumplimiento de programas de precios en el caso de las grandes superficies en Alimentos es del 97,4 % con Precios Cuidados mientras en el Autoservicio es del 15,4 % para el caso del programa Super Cerca”, indicó.
«El cumplimiento de los programas de precios cuidados en las grandes superficies comerciales es mayor que el programa Super Cerca en el resto de los formatos comerciales de consumo masivo. Incluso en estos últimos en muchos casos por ser razones sociales independientes no tiene las mismas marcas o presentaciones porque administran su oferta y surtido en góndola en relación con necesidades muy específicas de la demanda en la cercanía por lo cual hace más difícil su cumplimiento», explicó Di Pace.
Para el director de Focus Market, “los programas de controles de precios y salarios en Argentina han tenido diferentes etapas desde el segunda y tercera presidencia de Perón, se volvió apostar en 1985 con Alfonsín y su plan de estabilización, en 2011 se recurrió al cepo cambiario y en 2013 al congelamiento de precios y hasta ahora ninguno de estos programas logro resolver el problema de la inflación”.
“El peso argentino pierde poder adquisitivo en forma permanente por que su emisión es enorme y no demandada por la economía real sino para financiar un déficit fiscal creciente. En rezago aumenta el nivel de precios y luego esos precios congelados recuperan su nivel reprimido en los acuerdos», finalizó.