BUENOS AIRES (ANP).- El redoblamiento de la apuesta de los gremios aeronáuticos en Aerolíneas Argentinas podría terminar jugando en contra de los trabajadores y a favor de la idea de privatización del gobierno de Javier Milei, advirtió hoy un empresario del sector turístico, que alertó sobre el hartazgo del público.
Leandro Péres Lerea, CEO y fundador de TurismoCero.com, señaló en una entrevista este viernes con CNN Primera Mañana que si bien el conflicto sigue escalando, «el gobierno está decidido a enfrentar y resolver» el tema, ya que está llevando a cabo conversaciones con distintas aerolíneas.
El empresario recordó que este es el paso previo a una privatización y que el gobierno ha comenzado a ceder vuelos, porque además ya cuenta con cuatro potenciales candidatos para hacerse cargo de tales frecuencias, entre ellas la brasileña Azul y Avianca.
«Los sindicatos, acostumbrados a la pelea pero no a que un gobierno los enfrente, le están haciendo un favor al gobierno instalando en la opinión pública que esto no da para más, están hartando a la ciudadanía con reclamos», subrayó.
En este sentido, consideró que una paritaria es un recurso válido pero que no puede mantenerse «en esta forma violenta, no podemos tener de rehén a la ciudadanía porque muchas cosas dependen de la aviación en un país tan grande», enfatizó.
Entre las posibles líneas de acción a seguir por parte del gobierno en el caso de la aerolínea estatal, Péres Lerea comentó que la infraestructura depende de la tasa aeroportuaria y habría que evaluar «qué hacen con ese dinero, además de que la mejor forma es hacer lo que están haciendo, como el recorte de beneficios, retiros voluntarios, achicamiento de la empresa y la quita de vuelos no rentables», enumeró.
«También deben fomentar que avancen las líneas aéreas que están y también las otras que pueden operar sobre todo el cabotaje y la conexión entre el interior con el exterior», añadió.
Cabe recordar que tras las asambleas y paros sorpresivos que provocaron cientos de cancelaciones de vuelos en las últimas semanas, el gobierno declaró la esencialidad de la aviación comercial y amenazó a los gremios con avanzar en la privatización de la compañía, incluso el eventual cierre de la aerolínea de bandera.