Buenos Aires, may 20 (ANP)- Las pymes de las economías regionales tuvieron en abril “serios problemas” y debieron enfrentar inconvenientes relacionados con el capital de trabajo, el pago de salarios e impuestos, las exportaciones y la cadena de pagos, además de las dificultades con los precios para la compra de insumos a raíz del incremento de la brecha entre el dólar oficial y el paralelo, sostuvo hoy la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME).

La entidad elevó al ministro de Agricultura, Luis Basterra, un informe que muestra los resultados de una encuesta realizada a pequeños y medianos productores agropecuarios de más de 20 complejos productivos de todo el país.

“El Covid-19 pegó fuerte en las economías regionales”, destacó la cámara presidida por Gerardo Díaz Beltrán, que indicó al respecto que el mes pasado “los productores tuvieron serios problemas para trabajar con normalidad, comprar insumos, consensuar el valor del dólar, cobrar cheques, exportar, vender, pagar salarios y acceder a los programas oficiales”.

Entre los principales aspectos señalados en el informe entregado a Basterra, CAME resaltó que “hay un 11% de productores que no pudo cosechar/producir y otro 48% que lo hizo parcialmente”, al tiempo que indicó que “por la falta de producción y ventas, ese conjunto de productores pymes estará necesitando US$ 812 millones en capital de trabajo, lo que les permitirá mantener la subsistencia de la explotación agroalimentaria”.

Por otra parte, aseguró que “sólo el 53% de los productores relevados contó con todo su personal para cosechar/producir en abril” y que “el 47% restante lo hizo con 75% o menos de su dotación”.

“El 82% de los pequeños y medianos productores tuvo dificultades para comprar materias primas o insumos, ya sea por dificultades en sí o por retrasos en la entrega”, agregó.

Asimismo, remarcó como otro de los temas conflictivos “los problemas para fijar el valor del dólar”, ya que si bien el 56% pudo comprar insumos y materia prima a la cotización oficial, un 29% “debió comprar a valor blue, mixto, CCL o MEP”.

En cuanto a los exportadores, “sólo el 26% respondió no tener inconvenientes para exportar, mientras que el 74% planteó dificultades, principalmente por las demoras en la logística, las complicaciones en la tramitación de autorizaciones y registros, y la volatilidad del tipo de cambio que hace difícil fijar el precio”.

Si bien la cadena de pagos fue un problema, CAME admitió que lo fue “de menor magnitud que en sectores como el comercio o la industria”, al punto que en abril, el 60% de los productores no tuvo cheques rechazados.

“En el caso de los cheques cubiertos, el 83% de los productores no tuvo problemas para afrontar sus obligaciones contraídas. El 17% sí, pero sólo el 8% tuvo más de 50% de no coberturas. Un porcentaje preocupante por sí mismo, pero menos cuando se lo compara con otras actividades de la economía”, señaló la entidad.

CAME  indicó además que “el 29% de los productores no pudo hacer frente al pago de servicios públicos de abril”, proporción que “en algunos sectores no agropecuarios, llegó al 80%”, situación que se agrava si se tiene en cuenta que “en las economías regionales hay muchas producciones que son electrodependientes, como ser la olivicultura, la vitivinicultura y la horticultura”.

Con el pago de impuestos, manifestó que “el 55% de los productores pudo afrontarlos, mientras que el 45% restante no” y que entre estos últimos los mayores inconvenientes se dieron en el pago de IVA (23%), contribuciones patronales (19%), impuesto a las ganancias (18%) e impuestos provinciales (18%).

En cuanto a los salarios, indicó que “el 40% de los productores no pudo abonar salarios el mes pasado” y que entre le 60% que los pudo pagar “38,9% lo hizo con las ventas realizadas entre marzo y abril y un 37,4% con fondos propios”.

 

 

Por NP