POR FACUNDO CASAL*

BUENOS AIRES (ANP).- Bitcoin es una criptomoneda que lleva 13 años revolucionando la economía mundial, pero ¿por qué se debería considerar siquiera compararla con un commodity como es el oro?

Muchos alegarán que el oro es un activo de resguardo de valor probado del que nos podemos fiar, también que soporta crisis económicas o políticas. ¿Es realmente cierto?

Analicemos un poco estas afirmaciones populares. Si tomamos como ejemplo la actual guerra que se está desarrollando en territorio ucraniano, podemos afirmar bajo la lógica comúnque sería difícil transportar 700 mil dólares americanos en oro, ya que este monto equivaldría a un lingote bancario de aproximadamente 12 kilos. En medio de un país en guerra, con requisas de soldados en los retenes, sería una mala idea transportarlo con nosotros y también sería mala idea dejarlo en un lugar en el que sabemos poco qué ocurrirá o cuándo podremos regresar.

Podemos afirmar que la creencia popular de que es un resguardo de valor se encuentra condicionado a donde tengamos físicamente nuestro metal, ya que en una economía en guerra no podemos esperar transaccionar nuestro lingote en un banco o local seguro, además de que su cotización estaría ligada a quienes realmente estén dispuestos a comprárnoslo y por cuánto.

Otro punto a destacar es que, como mencionamos, el resguardo de valor depende de tener compradores dispuestos a comprarnos nuestro activo. En la actualidad, China y Rusia son los países que poseen la mayor cantidad de oro físico y como la mayoría sabe, el presidente Nixon eliminó el patrón Dólar-Oro en 1971, haciendo que éste deje de ser una moneda convertible.

Entonces, ¿quién reserva realmente valor en oro?

Analizando la historia del oro, este incrementó su cotización en cada crisis que vivió el planeta porque la turbulencia en los mercados siempre derivó a un refugio en este commodity que no defrauda, o mejor dicho, no defraudaba.

Durante los períodos de turbulencia más recientes el oro subió un 18,1% desde principios de 2020, tiempo que incluye una pandemia global que llevó a una recesión masiva, un mercado bajista y un aumento vertiginoso de los precios de las materias primas con una inflación elevada, siendo el momento del oro para brillar. No obstante, si bien la materia prima presentaba rendimientos razonables, estos fueron mucho más bajos que los de la renta variable y las materias primas en general, y apenas superiores a los de los bonos. Por lo que al oro le fue bien, pero peor de lo esperado.

Según J.P Morgan “el oro registró salidas de alrededor de 7 mil millones de dólares a principios del año, mientras que bitcoin registró entradas de al menos 3 mil millones de dólares. Esto causó el bajo rendimiento relativo del oro y disparó el precio Bitcoin”

Pasando en limpio, creo que este bajo rendimiento ante períodos de turbulencia actuales, incluida la guerra antes mencionada, en los que se esperaba un aumento en el oro, este fue opacado por la función de las criptomonedas para que tanto Rusia como Ucrania reciban dinero desde otras partes del mundo, demostrando que la cotización del oro simplemente es una especulación y que no es tan sencillo de transaccionar como lo es bitcoin.

No estoy mencionando que ahorrar en oro físico no sea una excelente opción, por el contrario, este metal lleva con nosotros miles de años siendo elegido para reservar valor, pero no reservaría mis ahorros más líquidos en él, sino que apostaría por bitcoin. Creo que la cotización de ambos activos es poco clara, bitcoin es muy joven y el oro físicamente está ligado a cuánto nos paguen por este en el momento en que queramos venderlo.

A su vez, bitcoin puede utilizarse como un medio de pago y no paga intereses, permitiendo su almacenamiento por largos períodos de tiempo. Además, en comparación a los metales preciosos, las criptomonedas no corren peligro de robo y poseen medidas de seguridad.

*CEO de South American Miners (SAM)

Por NP