BUENOS AIRES (ANP) La inflación de mayo en la Ciudad de Buenos Aires fue del 4,4%, el menor registro de los últimos tres años, en un mes caracterizado por la contención de los precios regulados, la atenuación de los incrementos en los alimentos y la baja en las cuotas de los planes de medicina prepaga, de acuerdo con la información dada a conocer hoy por la Dirección General de Estadística y Censos (DGEyC).
El incremento del Índice de Precios al Consumidor porteño acumulado en los primeros cinco meses del año ascendió al 80,2%, en tanto la variación interanual se ubicó en el 280,9%, 11,6 puntos porcentuales menos que en la medición de abril.
Durante mayo la variación del IPCBA respondió fundamentalmente a las subas en Alimentos y bebidas no alcohólicas, Vivienda, agua,
electricidad, gas y otros combustibles, Restaurantes y hoteles, Transporte e Información y comunicación, que en conjunto aportaron 3,41 puntos porcentuales al alza del Nivel General.
Alimentos y bebidas no alcohólicas aumentó 4,8%, contribuyendo con 0,93 p.p. a la variación mensual del IPCBA. Al interior de la división, los principales impulsos provinieron de Verduras, tubérculos y legumbres (24,2%), Leche, productos lácteos y huevos (4,5%), Pan y cereales
(3,5%) y Carnes y derivados (2,5%).
Vivienda, agua, electricidad, gas y otros combustibles promedió un incremento de 4,8%, con una incidencia de 0,86 p.p. en el Nivel General, al impactar principalmente las subas en los valores de los alquileres y de los gastos comunes por la vivienda. Le siguió en importancia, el arrastre que dejó la actualización de la tarifa residencial del servicio de suministro de agua que entró en vigencia el mes previo.
Restaurantes y hoteles se elevó 5,7% e incidió 0,59 p.p., como resultado de las alzas en los precios de los alimentos preparados en restaurantes, bares y casas de comida.
Transporte registró una suba de 5,2%, con una incidencia de 0,54 p.p., principalmente por la actualización en el valor del viaje en subte (a partir del 17 de mayo). Le siguieron en importancia, las alzas en los precios de los combustibles y lubricantes para vehículos de uso del hogar, de los estacionamientos y de los peajes. En sentido contrario, las caídas en los valores de los pasajes aéreos contribuyeron a quitar presión sobre esta división.
Información y comunicación promedió un incremento de 7,7% e incidió 0,49 p.p., debido a las subas en los abonos de los servicios de comunicación agrupados y de telefonía móvil.
El resto de las divisiones tuvo una incidencia positiva, aunque menor, en el Nivel General; con excepción de Salud, que registró una variación negativa de 4,2% e incidió -0,39 p.p., como resultado de la decisión del Gobierno Nacional de retrotraer los valores de las cuotas de la medicina prepaga.
Pese al congelamiento de tarifas de algunos servicios públicos que hubo en el mes, los precios de los servicios aumentaron más que los bienes, con variaciones de 4,8% y 3,8%, respectivamente.
Los precios regulados tuvieron un incremento del 2,2%, los estacionales un 3,9%, en tanto la inflación núcleo (que en la clasificación de la DGEyC figura como «resto») fue la única que superó el nivel general, con un 5,1% de aumento.