NUEVAS PALABRAS (ANP) .- Y Los Pumas le ganaron, no sin dificultades, a Japón y se mantuvieron dentro del selecto grupo de “los ocho” mejores equipos del mundo, lo cual no es poco para un equipo plagado de errores.
Como dijimos anteriormente, el equipo nacional es “de segundo orden”, capás de tener un buen partido y ganarle a Australia o a Sudáfrica, pero también tener un bajo rendimiento y perder de manera bochornosa como le ocurrió a comienzo de este Mundial con Inglaterra, selección que jugó casi todo el partido con un jugador menos.
Porque seamos honestos, a Los Pumas no le sobró nada con Samoa, contra Chile le ganó como la diferencia de jerarquía que lo establecía de ante mano, y con Japón, recién en el segundo tiempo pudo hacerse del juego.
Pases a la altura de las rodillas, pelotas que quedan “cortas”, penales accesibles que no son convertidos, son solo algunos de los defectos que “cada tanto” aparecen en el conjunto celeste y blanco, el mismo que «se pega una siesta” en algún momento del partido.
“Ahora se viene una prueba de fuego. Gales va a ser un partido chivo, con un 50 y 50 de posibilidades”, dijo Daniel Hourcade, quien supo dirigir a uno de los mejores equipos de Los Pumas. Habrá que recordar que con Inglaterra también estábamos en “50 a 50” en oportunidades, y perdimos de manera inapelable.
Los Pumas tienen la oportunidad de ganarle a Gales, un equipo muy sólido en defensa, que viene invicto, y codearse entre los “cuatro primeros”. Ya cumplió al quedar en el pelotón que va desde el quinto al octavo, algo que no es poco, pero la forma en que lo logró no fue una “maravilla” como muchos creen que es el rugby argentino.
La cita es este sábado 13 de octubre, a las 12.00, hora de Argentina, y tal vez sea la última oportunidad de ver a jugadores que hicieron “grande” a los pumas, como Juan Imhoff, Agustín Creevy, o Tomás Cuvelli, relegados a los minutos finales de los segundos tiempos.