La última semana de enero marcó un punto de inflexión en la dinámica inflacionaria argentina, que en los últimos meses se había caracterizado por incrementos de los alimentos por debajo del nivel general debido al comportamiento del precio de la carne, que incluso tuvo bajas en algunas semanas.
Esa situación tuvo su fin en la quinta semana de enero, en la que el precio de los cortes de carne vacuna tuvieron un repunte del 5,3% respecto de la semana anterior y se constituyeron en el rubro que lideró las alzas del período, según el relevamiento de la consultora LCG.
La importancia del aumento de la carne en la última semana del mes pasado también se puede dimensionar si se tiene en cuenta que aportó 1,64 punto porcentual al incremento general del 2,72%, el más alto desde la primera semana de octubre del año pasado.
La inflación semanal se aceleró 1,97 punto respecto de la semana anterior y el índice de alimentos y bebidas presentó una inflación mensual de 5,3% promedio en las últimas 4 semanas y 5,9% punta a punta en el
mismo período.
El 5,3% de la inflación en alimentos representó la sexta suba semanal consecutiva y el nivel más alto desde la primera semana de noviembre.
Cuatro rubros tuvieron alzas superiores al 2,72% de la medición semanal: además del ya mencionado 5,3% en Carnes, hubo alzas del 3,8% en Comidas listas para llevar, 3,3% en Productos de panificación, cereales y pastas y 3% en Condimentos y otros productos alimenticios.
En la medición mensual, por encima del 5,3% promedio se ubicaron Comidas listas para llevar (8,6%), Productos lácteos y huevos (7,3%), Frutas (7,2%), Verduras (6,7%), Bebidas e infusiones para consumir en el hogar (6,5%) y Condimentos y otros productos alimenticios (6,1%).
A pesar de haber liderado las subas de la quinta semana, las carnes se mantienen debajo del nivel general en la medición mensual con un 3,9%, lo que hace prever que su impacto en la inflación general se hará notar con mayor virulencia en febrero.