Los subsidios a sectores económicos, empresas públicas y fondos fiduciarios alcanzaron en los primeros diez meses del año a $ 1.830.124 millones, con un incremento anual del 51,1%, 16,2 puntos porcentuales menos que la inflación acumulada del período en comparación en el mismo lapso del año pasado.
La información fue difundida por la Asociación Argentina de Presupuesto y Administración Financiera Pública (ASAP) y confirma la tendencia descendente en términos reales, ya que los incrementos nominales de los últimos meses -en especial desde la asunción de Sergio Massa como ministro de Economía- siempre se ubicaron por debajo de la variación de los precios al consumidor.
El ajuste queda puesto de manifiesto con el repaso de los incrementos interanuales acumulados a lo largo de 2022, con lo que queda en evidencia un descenso ininterrumpido mes a mes en la variación porcentual: 184,8% en enero, 153,4% en el primer bimestre, 135,4% en el trimestre, 128,7% en el cuatrimestre, 100,5% en cinco meses, 94% en el primer semestre, 82,7% en siete meses, 65,6% en ocho y 54,2% en nueve.
La ejecución de los fondos presupuestados para transferencias corrientes dirigidas al sector energético, que concentran el 78% de los subsidios económicos y evidenciaron un aumento interanual de 56,2%, se destinaron principalmente a CAMMESA ($930.941 millones), a Energía Argentina S.A. (ex IEASA) ($306.892 millones), al Fondo Fiduciario para Subsidios de Consumos Residenciales de GLP de Sectores de Bajos Recursos y para la Expansión de Redes de Gas Natural ($31.919 millones), al Plan Gas no Convencional ($11.664 millones), al Plan Gas IV –Decreto 892-2020 ($23.081 millones), a Yacimientos Carboníferos de Río Turbio ($9.519 millones) y a la Asistencia Económica Transitoria a las Empresas Productoras, Fraccionadoras y Distribuidoras de GLP ($6.603 millones).
Los subsidios al transporte, que totalizaron $294.249 millones, subieron un 86,9% y se asignaron al Fondo Fiduciario del Sistema de Infraestructura del Transporte Automotor ($138.676 millones, principalmente subsidios a colectivos) y al Transporte Ferroviario ($141.917 millones), canalizados en este último caso principalmente a través de la empresa pública Operador Ferroviario S.E. ($124.508 millones), la empresa privada Belgrano Cargas y Logística S.A. ($10.939 millones), y la empresa Desarrollo del Capital Humano Ferroviario SA ($4.686 millones).
Adicionalmente se otorgaron $6.381 millones a empresas de transporte aerocomercial, en su mayor parte dirigidos a la Empresa Argentina de Navegación Aérea S.A. La asistencia a Aerolíneas Argentinas y Austral no está incluida por no estar registrada como un gasto corriente o de capital, sino como inversión financiera. Durante los primeros diez meses de 2022 se realizaron aportes de capital a Aerolíneas Argentinas por $50.514 millones.
Los subsidios a fondos especiales y empresas públicas no vinculadas al transporte ni a la energía fueron de $49.489 millones, incrementándose un 60,9% en términos interanuales. De este monto, $12.060 millones se destinaron al Correo Argentino, $8.474 millones a Radio y Televisión Argentina S.A., $5.243 al Fondo Fiduciario para la Protección de los Bosques Nativos, $4.928 millones a ACUMAR, y $4.121 millones al Fondo Nacional de Manejo del
Fuego, con motivo de atender la emergencia producida por los incendios en el Litoral.
Las transferencias corrientes al sector industrial llegaron a $25.569 millones y experimentaron una reducción interanual de 65,4%, y tuvieron como destino básicamente al Fondo Nacional de Desarrollo Productivo (FONDEP) y al Fondo de Garantías Argentino (FoGAr).
En cuanto a las erogaciones para el financiamiento de gastos de capital, tuvieron un incremento del 37%.
En términos nominales se ejecutaron $131.270 millones, concentrados básicamente en Energía Argentina S.A. ($43.206 millones), el Fondo Fiduciario de Infraestructura Hídrica Decreto N° 1381/01 ($17.290 millones), las empresas Administración de Infraestructuras Ferroviarias S.E. ($15.296 millones), AYSA ($15.030 millones), Operador Ferroviario S.E. ($7.010 millones), Yacimientos Carboníferos de Río Turbio ($4.900 millones) y Casa de Moneda ($3.876 millones).