El año arrancó de la peor manera para el ministro de Economía, Martín Guzmán, de cara a las negociaciones con el Fondo Monetario Internacional (FMI) en materia de contención al gasto en subsidios económicos, si se tiene en cuenta que en enero ascendieron a $66.786,2 millones, con un alza interanual de nada menos el 184,8%.
Los datos aportados por la Asociación Argentina de Presupuesto y administración Financiera Pública (ASAP) se dieron a conocer casi en simultaneidad con la presentación del texto del Memorando puesto a consideración del Congreso y dejan en evidencia que los aumentos nominales acordados para las tarifas de electricidad y gas resultarán insuficientes para reducir un gasto que en el primer mes de 2020 cuadruplicó el déficit primario de $16.698 millones.
Al respecto, el detalle del gasto en subsidios de enero muestra que en el sector energético el aumento interanual fue del 191,2%, en transporte del 214,8% y en el sector industrial del 287,6%, concentrándose el “ahorro” en otras empresas públicas (-71,2%) y en el sector rural y forestal (-100%).
El incremento sucede a un 2021 con un crecimiento del gasto en subsidios del 105,1% y en medio del compromiso por reducir su gasto para el año en curso, por lo que resta seguir con atención la evolución de las transferencias en los próximos meses, teniendo en cuenta las subas estacionales de invierno por la mayor importación de gas, cuyo precio se disparó a partir de la invasión rusa a Ucrania.
Las transferencias destinadas a la atención de gastos corrientes (subsidios propiamente dichos) fueron de $65.395,6 millones (97,2% del total) y aumentaron 185,3% respecto de enero de 2021, en tanto los girados para gastos de capital alcanzaron a $1.390,6 millones, con un incremento interanual del 161,8%.
La ejecución de los fondos presupuestados para transferencias corrientes dirigidas al sector energético, que reúne la mayor parte del presupuesto vigente correspondiente a subsidios económicos alcanzó a $45.967,7 millones (+191,2%) que se destinaron principalmente a CAMMESA ($44.349 millones, para subsidios a distribuidoras de electricidad), a la Asistencia Económica Transitoria a las Empresas Productoras, Fraccionadoras y Distribuidoras de GLP ($711,9 millones) y al Plan Gas no Convencional Resolución (MINEM N° 46/2017) ($681,3 millones).
Los subsidios al transporte totalizaron $18.864,8 millones (+214,8%), de los cuales $11.094,8 millones se destinaron al Fondo Fiduciario del Sistema de Infraestructura del Transporte Automotor y $7.136,6 millones al Transporte Ferroviario, canalizados a través de la empresas pública Operador Ferroviario S.E. ($5.861,7 millones), la empresa privada Belgrano Cargas y Logística S.A. ($861,5 millones), y la empresa Desarrollo del Capital Humano ($280 millones) en tanto que se destinaron $631,9 millones a empresas de transporte aerocomercial, incluyendo la Empresa Argentina de Navegación Aérea S.A.
La asistencia a Aerolíneas Argentinas y Austral no está incluida por no estar registrada como un gasto corriente o de capital, sino como inversión financiera. Durante enero de 2022 se realizaron aportes de capital a las empresas Aerolíneas Argentinas S.A. por $4.274,7 millones, detalló ASAP.
Por otro lado, las empresas públicas no vinculadas al transporte ni a la energía demandaron transferencias para sus gastos de funcionamiento por $310,3 millones, de las cuales $300 millones se destinaron a ACUMAR, implicando ello una caída interanual del 71,2%.
Las transferencias corrientes realizadas durante enero a empresas al sector industrial llegaron a $252 millones (de los cuales la mayor parte se destinó a Fabricaciones Militares S.A. y a la Fábrica Argentina de Aviones General San Martín).
En cuanto a las erogaciones para el financiamiento de gastos de capital de empresas públicas, fondos fiduciarios y el sector privado, tuvieron un incremento del 161,8%.
En términos nominales se ejecutaron $1.390,6 millones, en su mayor parte destinados a la empresa Administración de Infraestructuras Ferroviarias S.E., a ACUMAR y a la empresa Operador Ferroviario S.E.