Buenos Aires, may 13 (ANP)- El director de Research for Traders, Gustavo Neffa, cuestionó la “impericia” de los negociadores argentinos en la presentación de la propuesta de reestructuración de la deuda y advirtió que el país no debe recurrir a la colocación de bonos de legislación extranjera “si no entendemos quiénes son los jugadores del mercado internacional”.
Neffa consideró que los resultados obtenidos por la Nación y la provincia de Buenos Aires, con un grado de aceptación del 12,4% y 23%, respectivamente, “huelen más a fracaso que a otra cosa” y que ahora queda esperar el vencimiento de los nuevos plazos, con una adhesión que estará supeditada a las características de sendas ofertas.
“El riesgo está en si la contrapropuesta de los acreedores es demasiado ambiciosa o en que sea bastante negativa la voluntad del gobierno de querer cambiar mucho la propuesta original”, planteó en una entrevista concedida al programa Precisiones, por la AM1220 Ecomedios.
Al respecto, Neffa puntualizó que el gobierno “tiene que convencer a Blackrock, Fidelity, los grandes peces gordos que manejan administradores en su mayoría residentes en Estados Unidos y que no son buitres, sino fondos que invirtieron, están acusando el impacto y quieren recuperar el dinero”.
En ese sentido, señaló que “cuando el gobierno plantea una oferta que equivale a un descuento del 66%, es lógico que la primera reacción sea un rechazo”.
Ese descuento, explicó, significa que “para pasar de un bono a otro hay que convalidar una quita de dos tercios de la tenencia” y consideró que “hay un poco de impericia en pretender que un acreedor pueda poner la firma en una propuesta de esa naturaleza”.
Asimismo, cuestionó al ministro de Economía, Martín Guzmán, quien en los pasos previos al inicio de las negociaciones se manejó “sin muchos datos” y en la presentación que hiciera en el Congreso “sonó poco profesional, con números que no reflejaban el nuevo contexto en el que todo el mundo había ajustado sus estimaciones”.
“Estamos en una partida de póker con jugadores que tienen mucha más cintura, más experiencia en el tema, saben de temas legales. Si no entendemos quiénes manejan los mercados internacionales, entonces no acudamos acudamos a la legislación extranjera como hizo (el ex presidente) Néstor Kirchner en 2005”.
“Volvemos a tener problemas con la legislación extranjera después de habernos declarado en rebelión. Si no entendemos los instrumentos, los tribunales y los jugadores que están del otro lado, no podemos salir al mercado a emitir y después reclamar que no es justo en una segunda etapa”, manifestó.
En cuanto a lo que cabe esperar para el 22 de mayo, Neffa condicionó el nivel de aceptación a las características de la oferta y estimó que “si se acerca a un valor presente de 50 a 55 dólares, se va a resolver el problema”, pero si no se quiere cobvalidar ese escenario, “me imagino que va a haber una reasignación de la serie que sí lo haga”.
“Hay 21 bonos pero 29 series, porque un título puede tener distintas monedas y legislaciones. Si una serie alcanza el 75% de las voluntades individuales, se lo reagrupa en un paquete de bonos para declarar que esas series han sido reestructuradas. El resto va a quedar a la espera de una mejor oferta o sujeto a litigio”, indicó.
Si se da esta segunda opción, “la Argentina va a caer en un default parcial, aunque de hecho ya estamos en esa condición con las letes y bonos de legislación local”, precisó en referencia al “reperfilamiento” de fines del año pasado.
“Ahora la que más le preocupa es la ley extranjera, que le puede infligir mucho daño porque los tribunales suelen darle la razón a los acreedores, en tanto al que emitió los bonos y no los pagó le cae el peso de la ley”, subrayó.