Buenos Aires, may 3 (ANP)- Las ventas minoristas de los comercios pymes acusaron el impacto del primer mes de cuarentena absoluta y cerraron abril con un desplome del 57,6% en relación con el nivel del mismo mes de 2019, aunque en la mayoría de los rubros la caída fue superior al 70%, de acuerdo con el informe dado a conocer hoy por la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME).
La caída sin precedentes cobra mayor relevancia si se tiene en cuenta que la comparación es con un mes de baja venta, como fue abril 2019, cuando cayeron 13,4% anual.
“En abril hubo mucha disparidad de ventas, entre rubros, entre ciudades y entre comercios de un mismo ramo, según la política seguida frente a la cuarentena”, puntualizó la entidad presidida por Gerardo Díaz Beltrán, que señaló al respecto que, por ejemplo, “hubo negocios que cerraron al 100% y no facturaron nada, ni siquiera online, otros que se abocaron a esta modalidad electrónica y también aquellos que abrieron sus puertas”.
Por tal razón, hubo tres rubros con caídas en su ventas por debajo del promedio del 57,6%, como Alimentos y bebidas, que con una baja interanual del 16,6% fue el de mejor desempeño, seguido por Farmacia, perfumería y cosmética (-26,9%) y Ferretería, materiales eléctricos y construcción (-49,7%).
Pero los nueve rubros restantes llevaron la peor parte y siete de ellos tuvieron desplomes de más del 70%, en una lista encabezada por Joyería, relojería y bijouterie con una caída del 80,3%.
Los otros rubros que lideraron las bajas son Calzado y marroquinería (-79,9%), Bazar y regalos (-79,6%), Indumentaria (-79,1%), Mueblería, decoración y textiles para el hogar (-78,6%), Electrodomésticos y artículos electrónicos (-78,3%), Ropa y artículos deportivos y de recreación (-77,4%), Juguetería y librería (-67,6%) y Neumáticos y repuestos de autos y motos (-63,1%).
CAME destacó también que “el 94,5% de los comercios pymes relevados tuvieron declives en sus ventas y no cubrieron sus costos operativos”.
La entidad remarcó que el mes pasado “las ventas volvieron a estar marcadas por la restricción de circulación de gente que generó la cuarentena” y que “si bien con el correr del mes se fueron flexibilizando rubros, sobre todo en la modalidad online, no alcanzó para amortiguar el drástico derrumbe”.
Asimismo, indicó que “los comercios que abrieron o vendieron por internet tuvieron serios problemas de abastecimiento y faltas de precios de referencia, con algunos proveedores que comenzaron a pasar los precios con subas importantes o en dólares”.
En el caso del rubro Electrodomésticos y artículos electrónicos, uno de los de caídas más pronunciadas, “casi todo despacho fue online, mayormente de productos electrónicos donde muchas familias y comercios invirtieron en tecnología para realizar actividades cotidianas desde su hogar”.
Por otra parte, CAME señaló que el rubro de Electrodomésticos “casi no tuvo salida”, debido a que “fue un sector muy marcado por la pérdida en el poder adquisitivo familiar”.
En cuanto a Ropa y artículos de deportivos, precisó que “los comercios se manejaron mayormente por whatsapp, sobre todo en el caso de los localizados en barrios o ciudades más chicas, y venta por Internet” y que a raíz de la cuarentena “se despacharon atípicamente elementos de gimnasio como pesas, colchonetas y máquinas de caminar o correr”.
Alimentos y Bebidas fue el rubro de menor decline y en el segmento de venta online tuvo un incremento de 3,6%, aunque la Confederación remarcó que “la cantidad de comercios pymes de este rubro con comercio electrónico fue muy baja”.