BUENOS AIRES, SEP 5 (ANP).- El director de Analytica, Ricardo Delgado, apuntó a que “tomar medidas aisladas”, como el congelamiento de tarifas o la restricción a la exportación de carne vacuna, “para controlar la inflación, no conduce a nada y los precios siempre terminan ganándole a los salarios”.
«Me parece importante tratar de ver a la inflación como el gran destructor de los ingresos de las familias”, dijo Delgado al programa “Es Por Acá”, por Radio Milenium .
Explicó que desde su consultora, “tratamos de poner ejemplos bien concretos de qué significa esa destrucción en términos de poder de compra de diferentes alimentos, de diferentes electrodomésticos o del impacto que tiene sobre la pérdida del salario real sobre consumos elementales.»
En ese marco “tomamos un salario promedio de una persona de 40 años en la Ciudad de Buenos Aires y lo que hicimos, desde el 2013 a esta parte, tratar de ver cuál ha sido la evolución en cuánto compraba ese salario de kilos de pan o de asado. (..) Los últimos cuatro años han sido los años del mayor desplome del salario en los últimos diez, que ya venían cayendo.»
Delgado apuntó a que “si bien en estos últimos meses hay una cierta recomposición del salario producto de mayores paritarias y más gasto social en los sectores vulnerables, nada de eso (del desplome del poder de compra) se ha podido corregir.»
En términos de kilo de pan, con el salario actual “se puede comprar un 30% menos que en el 2017 o un 20% menos de litros de leche o casi 40% menos de kilos de asado. Son todos datos oficiales. Esto obviamente genera un impacto y una demostración más de que hay que resolver el problema de la inflación.»
Para Delgado “la tarifa de gas y algún servicio básico elemental que hoy es internet (…) llegaron al 4% las de gas en la época de (Mauricio) Macri y hoy están un poquito por abajo del 4%, pero no mucho menos”.
El economista dejó en claro que “el congelamiento (de las tarifas” existe” pero “cuando uno mira esta caída de casi 40% en el poder de compra medida en kilos de asado en los últimos cuatro años, es evidentemente la demostración más clara que este tipo de políticas no resuelven el problema de la inflación en alimentos”.
“Si uno mira el asado en el 2013, se podía comprar el doble de lo que se compra hoy. Hoy podemos comprar alrededor de 100 kilos de asado con este salario medio promedio, en el 2013 se podían comprar 200 kilos. La caída es realmente estrepitosa”, dijo el analista
“Esto evidentemente lo que demuestra que tomar medidas aisladas para controlar la inflación no conduce a nada y la inflación siempre termina ganándole al salario», dijo Delagado