El paquete de medidas anunciado el jueves por el Gobierno corre el riesgo de no generar el efecto deseado por sus autores, por representar un conjunto de iniciativas tardías, insuficientes y “con poca probabilidad de éxito”, según el análisis de la consultora Invecq.
“Estas respuestas llegan tarde, una vez que el dólar ya subió más de un 10% en menos de diez días, los bonos soberanos se hundieron hasta alcanzar paridades del 25%, el riesgo país trepó hasta los 2.125 puntos básicos, y huyeron de los Fondos Comunes de Inversión de renta fija en moneda local unos 237.700 millones de pesos”, advirtió la entidad dirigida por el economista Esteban Domecq.
En el informe de Invecq, se abordó el análisis del DNU que reestructura el Presupuesto 2022, la suba de tasas dispuesta por el Banco Central y la “vaga y escasa” segmentación tarifaria para los servicios públicos de gas y electricidad.
Del nuevo Presupuesto (segundo decreto, si se tiene en cuenta que el proyecto de ley fue rechazado por la oposición en el Congreso) surge la reafirmación de un déficit primario del 2,5% del PBI, una meta cuyo cumplimiento, según la consultora, “será cuanto menos desafiante”.
Al respecto, puntualizó que “el déficit acumulado del primer cuatrimestre se incrementó casi 3,5 veces respecto al mismo período del año anterior, y el gasto primario lleva siete meses aumentando a un ritmo muy superior a la inflación”.
“Combinado con un crecimiento económico que ya muestra señales de desaceleración y será apenas cercano al 3% este año, es difícil que se pueda mejorar la marca del 2021, cuando el déficit fiscal alcanzó el 3% del PBI”, alertó.
En cuanto al impacto en la reducción de los subsidios que podría implicar la aprobación “tan esperada como dilatada” de la segmentación tarifaria, Invecq consideró “difícil” estimarlo “dada la vaga y escasa información difundida hasta el momento”.
“No se sabe a ciencia cierta sobre qué usuarios recaerá la reducción en la asistencia estatal, aunque sí se conoce que aproximadamente el 90% de las personas no recibirán mayores aumentos en sus tarifas en lo que resta del año más allá de los que sufrieron hasta el mes de junio”, indicó.
Invecq calificó como “una nueva reacción tardía forzada por el contexto y el mercado” al aumento de 300 puntos básicos para la tasa de política monetaria por parte del Banco Central.
En ese sentido, remarcó que “la tasa de Leliqs se encuentra actualmente en 66% efectiva anual y quedaría fácilmente en terreno negativo en términos reales si la inflación no desciende del 4,5% mensual en promedio, algo difícil de alcanzar por el momento”.
Respecto a la suba a un piso del 53% en los plazos fijos, al igual que las previas, tendrán “poca efectividad” para dinamizar el ahorro en pesos y “no sorprende que los préstamos en pesos al sector privado acumularon su cuarta contracción mensual en lo que va del año en términos reales, y sufren una caída del 0,3% interanual a precios constantes”.
Asimismo, la recomposición del mercado de deuda tras una nueva colocación de títulos por parte del Ministerio de Economía “fue costosa y refleja que el mercado aún permanece con dudas”.
“EL BCRA tuvo que asistir al tesoro con compras en el mercado secundario los días previos a la licitación del 14 de junio, para reducir el rendimiento de los bonos, y Guzmán debió elevar las tasas ofrecidas, como el caso de la Ledes que trepó más de dos puntos porcentuales, o los bonos CER que retornaron al plano positivo ofreciendo retornos de entre 2% y 3% anual sobre la inflación”, señaló.
Pero “el verdadero desafío será a fines de junio, cuando el Tesoro deba refinanciar aproximadamente 600.000 millones de pesos”, muchos más que los 11.000 millones en juego del martes pasado.
Como cierre, Invecq concluyó que “las medidas cuentan con poca probabilidad de éxito desde el momento en que salen a la luz, no solo porque no logran anticipar los desajustes y son simples respuestas fuera de tiempo, sino también por verse afectadas por un contexto de escasa credibilidad, con expectativas que evolucionan desfavorablemente a medida que las debilidades del escenario macroeconómico se confirman”.