BUENOS AIRES (ANP).- El exministro de Defensa, Miguel Angel Toma, advirtió hoy que si el Gobierno no actúa con celeridad frente a las amenazas de organizaciones criminales contra funcionarios y sus familias, el narco se convertirá en un Estado paralelo que desafiará abiertamente al poder constitucional.
En diálogo con CNN Primera Mañana, y en relación a las amenazas contra el gobernador santafesino, Maximiliano Pullaro, Toma señaló que se trata de «un desafío muy claro por parte de un poder emergente, que se ha ido desarrollando por la desidia del Estado y que ahora, que está gobernado por otro signo político, sufre las consecuencias de la desidia».
En este sentido, alertó que si no se actúa a tiempo «con la diligencia y la firmeza necesaria, estas estructuras ya directamente desafían al Estado, son un Estado paralelo».
A su vez, explicó que existen varias organizaciones criminales que están operando muy cerca de la Triple Frontera, un área que se ha convertido en «un centro de convergencia» para terroristas y narcotraficantes.
«Hay un maridaje que se está produciendo entre las estructuras terroristas y el narcotráfico, que se potencian y financian unas a otras», resumió.
«Se requiere profesionalidad y una acción muy clara y precisa de inteligencia para combatirlas, estas estructuras no se combaten simplemente con poner un policía en cada esquina sino que hay que combatirlas desmenuzando su estructura, su sistema de logística y, fundamentalmente, el lavado de dinero», concluyó.
Las amenazas contra Pullaro y su familia pusieron en alerta a todo el arco político y detonó una firme reacción del Gobierno. La actual ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, también habló en entrevista con CNN Radio y aseguró que su equipo ya está trabajando para desactivar estos hechos.
«Hemos dispuesto una serie de medidas que vamos a llevar adelante con presos de alto riesgo y de máxima seguridad que están en cárceles federales», dijo la funcionaria, y detalló que en los penales de Santa Fe quienes están realizando amenazas ingresarán a un programa de alto riesgo.
Además, sostuvo que los sospechosos van a estar aislados y no van a poder tener ningún tipo de contacto con nadie hasta que se aclare el origen de las amenazas a Pullaro.