Buenos Aires, mar 26 (ANP).- El economista Daniel Marx advirtió hoy que los términos de la negociación de la deuda de Argentina se tornaron “más difíciles que antes” a partir de la pandemia, y subrayó que la incertidumbre que persiste sobre el proceso de normalización de los pasivos soberanos está generando “discrepancias” y un «aumento fuerte» de la probabilidad de default.
En una videoconferencia transmitida por streaming por la Fundación Libertad y Progreso, el director ejecutivo de Quantum Finanzas señaló que difícilmente se pueda cumplir con el cronograma fijado por el Ministerio de Economía, que prevé finalizar el proceso de la deuda el 31 de marzo próximo. “Esta fecha no se ve factible, notamos atrasos importantes en la ejecución de ese cronograma”, resaltó.
En base a los indicadores macro del país, el experto dijo que la resolución del problema de la deuda está relacionado con la alta tasa de riesgo, y con la forma en que se buscará que ese ratio disminuya, en particular, atacando los temas estructurales que deben abordarse para cambiar patrones de conducta que hace que los inversores busquen refugiarse en el dólar.
“Esto es similar a lo que ocurre con cualquier reestructuración privada, en la que uno tiene mostrar cómo va a hacer para superar las circunstancias estructurales que se deben cambiar y para no tener que reestructurar periódicamente”, explicó. “Esto debería llevar a un acercamiento entre la visión del deudor y la de los acreedores, algo que si se materializa, haría disminuir esa tasa de riesgo”, agregó.
Marx subrayó también que el estado argentino ya agotó su capacidad de crédito al menos por un plazo extenso, con lo cual «no podemos contar con los recursos que antes daban una dinámica de stop and go». En este punto, instó a “pensar cómo revertir el resultado de la cuenta de capital, ver que el sector privado deje de buscar refugio en monedad extranjera y que vea oportunidades en ampliar inversiones, y que el sector público apoye”.
“Si eso no se logra, las condiciones macroeconómicas actuales no dan para pensar en un alivio de la deuda, por eso la importancia de que el programa del Gobierno sostenga (la propuesta), que le de consistencia y coherencia”, puntualizó.
Otra cuestión a atender es el manejo de la cuestión financiera, señaló. En este sentido, consideró que “si la intención del Gobierno es dar condiciones para creer en la legislación local, está haciendo bien en proteger ahorros, sacar activos ajustables por inflación, y tratar de ir preservando alguna estabilidad al respecto”.
Sin embargo, advirtió que la idea de cualquier cambio por decreto que afecte a la deuda en moneda extranjera con legislación local “sería visto como abuso del poder soberano», lo que claramente iría en detrimento de la baja del riesgo.
Por otro lado, Marx recordó que en mayo la Argentina enfrentará vencimientos por un total de US$ 2.700 millones, de los cuales aproximadamente 2.000 millones corresponden a pasivos con el Club de París.
“En teoría el gobierno lo puede prorrogar, pero el Gobierno ya ha dicho que quiere reestructurar esto y para hacerlo, en la práctica hay que tener un acuerdo con el FMI, algo que probablemente no esté listo para ese momento, por lo que puede ser que veamos un comunicado conjunto de Argentina y el FMI que solicite un plazo, aunque es algo que de suceder, debería implementarse en las próximas semanas”, resumió.
Asimismo, recordó que en mayo también opera un vencimiento de Bonar 24 por casi U$S 1.400 millones con el sector privado, bajo legislación local, para el que habría que contar con un acuerdo con acreedores extranjeros, lo que consideró difícil.
“Si esto no se resuelve se producirán los costos que ya conocemos, lo que debilitará el crecimiento de la economía, a todos les conviene que esto tenga una resolución, aunque la cuestión es en qué términos se haga”, sostuvo.
Según explicó Marx, se nota un empeoramiento en tales términos, “que hoy son más difíciles que antes porque tenemos una recesión muy aumentada por la pandemia y tenemos dificultad en cuanto a las visiones porque las tasas riesgo país han crecido y aunque los acreedores lo ven como algo temporario, la verdad es que no se sabe”.
Un segundo aspecto a considerar es el procedimiento y los canales efectivos de la negociación. “No están claros y eso está llevando a discrepancias y a que la probabilidad de default de Argentina está aumentando fuerte; no se sabe cómo se va a resolver, quedan pocas semanas y los próximos días serán cruciales”, alertó.