Buenos Aires, jun 2 (ANP), Desde hace alrededor de una semana el estrés de los contadores de las empresas está en aumento. Sucede que si bien completaron todos los trámites para acceder al beneficio del Programa de Asistencia al Trabajo y la Producción (ATP), en la web de la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP) no aparece la confirmaciòn. De hecho, ya comenzó a correr el plazo legal para el pago de sueldos y las empresas no saben si accedieron y cuáles van a ser los empleados que van a cobrar.
Con ese ramillete de reclamos fueron hoy los dirigentes de la Unión Industrial Argentina (UIA) a hablar con la titular de la AFIP, Mercedes Marcó del Pont. Fue en el contexto de la habitual reunión del Comité Ejecutivo, que se lleva a cabo martes por medio. Esta vez el encuentro fue de manera virtual, como se acostumbra en tiempos de pandemia y aislamiento social obligatorio.
Se analizaron varios temas, pero se podría asegurar que a los hombres de la UIA lo único que realmente le importaba era saber qué esta pasando con el programa. Hay que recordar que por problemas similares de gestión el presidente Alberto Fernández echó a Alejandro Vanoli de la conducción de la ANSES. Será por ello que esta semana hubo un rumor de que a Marcó del Pont le podría caber la misma suerte. Se pueden cometer errores en la gestión, pero con los sueldos de la gente no se puede. De ello depende que el cada vez más encrespado humor social no se traduzca en un repudio al gobierno.
La titular de la AFIP le prometió a los empresarios que la semana próxima van a estar los pagos, y que entre mañana y el viernes van a poder entrar al sistema de la AFIP para chequear los listados de empleados con sus liquidaciones correspondientes. Lo demás fue anecdótico. La felicitaron por el ATP y algunas medidas de facilitación del pago de impuesto para las empresas y le `pidieron que le tranmsmita al presidente Alberto Fernández que lance una nueva moratoria. También de paso, le titaron que ponga en marcha la Cuenta Corriente Fiscal…una medida que puede resultar un gran salvavidas a las empresas. Con ello padrían las empresas compensar al instante saldos a favor por impuestos que se pagan de mas debido al sistema de retenciones en las facturas