Los subsidios para el financiamiento de gastos corrientes y de capital de empresas públicas, fondos fiduciarios y el sector privado sumaron en los primeros once meses del año $2.013.480 millones, con  un incremento interanual del 51,8%, de acuerdo con el informe dado a conocer hoy por la Asociación Argentina de Presupuesto y Administración Financiera Pública (ASAP).

El aumento representa unos 28 puntos porcentuales menos que la inflación acumulada en el período y muestra un pequeño quiebre de la tendencia descendente en los incrementos interanuales a lo largo del año, si se tiene en cuenta que las subas respecto de los mismos períodos de 2021 habían sido de 184,8% en enero, 153,4% en el primer bimestre, 135,4% en el trimestre, 128,7% en el cuatrimestre, 100,5% en cinco meses, 94% en el primer semestre, 82,7% en siete meses, 65,6% en ocho, 54,2% en nueve y 51,1% en diez, para interrumpirse en el acumulado a noviembre con una leve alza de 0,7 punto porcentual.

Para la ASAP «esto se explica básicamente por el comportamiento de las transferencias de carácter corriente (subsidios propiamente dichos), que representan el 93,2% de este concepto del gasto».

La ejecución de las transferencias corrientes dirigidas al sector energético, que concentran el 77,6% de los subsidios económicos ($1.876.741 millones), evidenciaron un aumento interanual de 56,2%, y se destinaron principalmente a CAMMESA ($1.048.545 millones), a Energía Argentina S.A. (ex IEASA, $306.892 millones), al Fondo Fiduciario para Subsidios de Consumos Residenciales de GLP de Sectores de Bajos Recursos y para la Expansión de Redes de Gas Natural ($35.212 millones), al Plan Gas IV ($26.008 millones), al Plan Gas no Convencional ($11.664 millones), a Yacimientos Carboníferos de Río Turbio ($10.190 millones) y a la Asistencia Económica Transitoria a las Empresas
Productoras, Fraccionadoras y Distribuidoras de GLP ($8.696 millones).
Los subsidios al transporte, que totalizaron $330.153 millones, subieron un 91,8% y se asignaron al Fondo Fiduciario del Sistema de Infraestructura del Transporte Automotor (principalmente destinados a colectivos, $158.600
millones) y al Transporte Ferroviario ($155.995 millones), canalizados en este último caso principalmente a través de la empresa pública Operador Ferroviario S.E. ($136.161 millones), la empresa privada Belgrano Cargas y Logística S.A. ($12.102 millones), y la empresa Desarrollo del Capital Humano Ferroviario SA ($5.414 millones).

Adicionalmente se otorgaron $7.346 millones a empresas de transporte aerocomercial, en su mayor parte dirigidos a la Empresa Argentina de Navegación Aérea S.A.

La asistencia a Aerolíneas Argentinas y Austral no está incluida por no estar registrada como un gasto corriente o de capital, sino como inversión financiera. Durante los primeros once meses de 2022 se realizaron aportes de capital a  Aerolíneas Argentinas por $63.249 millones.
Los fondos especiales y empresas públicas no vinculadas al transporte ni a la energía demandaron transferencias por $63.097 millones, incrementándose un 90,7%. De este monto, $12.060 millones se destinaron al Correo Argentino, $11.474 millones a Radio y Televisión Argentina S.A., $9.506 millones al Fondo Nacional de Manejo del Fuego, $6.237 al Fondo Fiduciario para la Protección de los Bosques Nativos, y $5.028 millones a ACUMAR.
Las transferencias corrientes realizadas durante este período al sector industrial llegaron a $25.914 millones y experimentaron una reducción interanual de 67,4%. Se destinaron básicamente al Fondo Nacional de Desarrollo Productivo (FONDEP) y al Fondo de Garantías Argentino (FoGAr).
En cuanto a las erogaciones para el financiamiento de gastos de capital, tuvieron un incremento del 25,6%. En
términos nominales se ejecutaron $136.739 millones, concentrados básicamente en la empresa Energía Argentina S.A. ($43.206 millones), el Fondo Fiduciario de Infraestructura Hídrica Decreto N° 1381/01 ($17.290 millones), las empresas Administración de Infraestructuras Ferroviarias S.E. ($16.815 millones), AYSA ($16.379 millones), Operador Ferroviario S.E. ($7.010 millones), Yacimientos Carboníferos de Río Turbio ($5.300 millones) y Casa de Moneda ($3.876 millones).

Por NP