Buenos Aires, abr 8 (ANP)- Los despachos de cemento acusaron en marzo el impacto de la pandemia del coronavirus en la actividad de la construcción pública y privada, con un derrumbe interanual del 46,5%, con apenas 508.575 toneladas.
La Asociación de Fabricantes de Cemento Portland (AFCP) también informó que en el acumulado del primer trimestre el descenso respecto del mismo período de 2019 fue del 29,1%, en tanto prevé que para todo 2020 la caída se ubicará en torno al 20,5%, “considerando la incertidumbre de la situación sanitaria” y sin certezas sobre la fecha de finalización del Aislamiento Social, Preventivo y Obligatorio.
Las 508.575 toneladas del despacho total se compusieron de 502.541 toneladas correspondiente al despacho interno y 6.034 toneladas de exportación.
Al no haber importaciones de cemento, al igual que en todo 2019, el consumo resultó equivalente al despacho interno, indicó la entidad.
Asimismo, en el acumulado del primer trimestre los despachos totales alcanzaron a 1.961.646 toneladas, un 29,1% menos que las 2.765.097 toneladas de enero-marzo del año pasado.
Los números permiten anticipar una significativa caída de la actividad de la construcción de marzo que el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC) dará a conocer en los primeros días de mayo.
El organismo estadístico informó el martes que la actividad sectorial había caído en febrero un 22,1%, en tanto los empresarios de la construcción tenían una visión pesimista, incluso antes de que se dispusiera la cuarentena de la segunda quincena de marzo.
En ese sentido, el 46,1 de los empresarios que se dedican preferentemente a la obra privada, consideraron que la actividad disminuirá hasta mayo, contra solo un 8% que anticipó una mejora, mientras que el 45,9% restante no preveía mayores cambios.
En tanto, entre los que se dedican preferentemente a la obra pública, signada por un fuerte recorte de los fondos que destina el Gobierno tanto nacional como provincial, el 59,1% de los encuestados estimó que la actividad continuará en baja hasta mayo inclusive, contra solo un 9,1% que esperaba una reacción, mientras que el 31,8% restante no esperaba modificaciones.