Buenos Aires, jun 25 (ANP) La venta de nafta y gasoil creció en mayo un 23,3% respecto de abril, lo que ayudó a aligerar la caída general que alcanza al 35,5% si se la mide en relación a febrero, último mes antes de declararse la cuarentena.
Así lo informó hoy la Confederación de Entidades del Comercio de Hidrocarburos y Afines (Cecha) a partir de los datos de un informe generado por la consultora EconomicTrends , en base a datos de la Secretaría de Energía de la Nación.
En las naftas, “las ventas no llegaron a recuperar la mitad que previo al aislamiento dictado en marzo. En términos de facturación, el sector perdió cerca de $ 31.587,2 millones”, advirtió el informe.
Consideradas un servicio esencial, la venta de combustibles estuvo exceptuada de cumplir las medidas de cuarentena para paliar el avance del COVID-19, una situación que les permitió seguir operando, pero con una dramática caída de las ventas producto del aislamiento que afecta al resto de la población.
Con el levantamiento parcial de la cuarentena en distintas partes del país exceptuando AMBA “las ventas comenzaron a repuntar, pero aún se encuentran lejos de los valores previos a la pandemia”.
“Si bien continuamos en una situación crítica para todo el sector de las Estaciones de Servicio, siendo la mayor parte de los estacioneros PyMEs, podemos encontrar en este último informe algunos indicios de recuperación”, destacó la Cecha.
Lo que podremos ver con precisión en el informe es cuánto impactó el Covid en el sector, es decir la caída entre febrero y abril. Y cuánto falta todavía con los números de esa pequeña recuperación en mayo”, sostuvo Gabriel Bornoroni, presidente de CECHA.
Los datos son más duros si se segmenta únicamente con las naftas, donde la caída febrero-mayo ronda el 51,5 % en volúmenes totales. Allí el alza abril-mayo fue del 49,5 % El caso del Gasoil registró una caída del 19,8 % entre febrero y mayo, se explica por la demanda del campo y de los transportes, que siguieron operando a pesar de la cuarentena.
Una de las zonas más complicadas es la Ciudad de Buenos Aires, donde las ventas cayeron un 59 % en volumen de febrero a mayo, un cuadro que podría empeorar si se mantiene el pico de casos y se endurecen finalmente las medidas de cuarentena.