El recorte del gasto en jubilaciones y pensiones, subsidios económicos y transferencias corrientes a las provincias explica por sí solo la reducción del déficit primario en 2022 respecto del nivel de 2021, de acuerdo con el estudio realizado por el Instituto Argentino de Análisis Fiscal (IARAF).

El déficit primario tuvo una baja que le permitió al Gobierno sobrecumplir con la meta acordada con el Fondo Monetario Internacional (FMI) del 0,63% del Producto Bruto Interno (PBI) en comparación con el registrado el año anterior, debido principalmente a una disminución del gasto primario del 0,58% del producto.

El informe de la entidad dirigida por Nadín Argañaraz muestra que los gastos que más cayeron en términos de PBI fueron las jubilaciones y pensiones contributivas (0,27 punto porcentual), los subsidios a la energía (0,23 pp), las transferencias corrientes a las provincias (0,09 pp) y los subsidios al transporte (también 0,09 pp).

La suma de esos cuatro componentes es de 0,68 puntos porcentuales, es decir 0,1 punto más que la reducción total del déficit primario.

IARAF agregó que la ejecución de gastos e ingresos del Sector Público Nacional no Financiero de diciembre “arrojó una contundente reducción del déficit primario del 48% real”, una baja que “se logró por una caída del gasto primario del mes del 20% real, que más que compensó la caída real de ingresos del 5%”.

“Al acumular el año, el déficit primario terminó con una reducción real del 16%, lograda por una suba del 4,3% real de los ingresos totales y un gasto primario que se mantuvo en términos reales en el mismo nivel que en 2021”, agregó.

Este comportamiento de las variables fiscales en términos reales implicó finalizar el año con un déficit primario del orden de 2,4% del PIB, sobre cumpliendo la meta acordada con el FMI del 2,5% del PIB.

En cuanto a la variación real del gasto, los que más disminuyeron en términos reales respecto al 2021 fueron: Otros gastos de funcionamiento (-20%), Asignación Universal para Protección Social (-13,24%) y Subsidios al transporte (-11,05%), mientras los que más aumentaron fueron: Gastos de Capital (17,74%), Otros programas sociales (9,03%) y Asignaciones Familiares (8,28%).

Con las variaciones mencionadas, el gasto primario cerró el 2022 con la siguiente estructura: el gasto en Jubilaciones y Pensiones Contributivas significó el 33,9% del gasto primario anual, Salarios el 11,8%, Subsidios a la Energía el 9,9%, Otros programas el 8,8%, Gastos de Capital el 7,9%, Prestaciones del INSSJP el 3,7%, Otros gastos de funcionamiento el 3,6%, Pensiones no Contributivas el 3,6%, Asignaciones familiares el 3,4%, Transferencias corriente a Provincias el 3,3% , Transferencias a Universidades el 3,1%, Subsidios al transporte un 2,7% y, por último, Asignación Universal para la Protección Social representó el 2,4% del gasto primario del año.

Por NP