BUENOS AIRES, FEB 10 (ANP).- El Índice de Salarios registró en diciembre último un alza de 1,8% respecto de noviembre, frente a una inflación minorista que alcanzó a 4% en el último mes de 2020, de acuerdo a datos difundidos esta tarde por el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC).
Los trabajadores más castigados por la fuerte suba del IPC en diciembre fueron los que se desempeñan en el sector privado no registrado, que mostró un incremento contra el mes previo de sólo 1,2%.
En tanto, los empleados públicos y los trabajadores privados registrados también quedaron muy rezagados con respecto al aumento de los precios, con +2,4% y +1,6% respectivamente.
A lo largo de 2020, el IS logró una variación de 33%, también por debajo de la inflación anual, que se ubicó en 36,1%. Los trabajadores informales fueron los únicos que lograron superar al IPC anual, con una mejora de 39%, mientras que los privados registrados y los estatales quedaron por detrás con 34,4% y 26,8% respectivamente.
El alza de los precios de alimentos es una de las mayores preocupaciones del gobierno de Alberto Fernández, que amenazó recientemente a los ruralistas con fijar cuotas de exportación o con subir las retenciones a las exportaciones para asegurar valores más accesibles.
El problema también aceleró la convocatoria a la Mesa contra el Hambre, que dejó de reunirse para tratar el tema cuando comenzó la pandemia. Esta mañana, el jefe de Estado encabezó el relanzamiento de la iniciativa y mantuvo la primera reunión virtual del Consejo Federal Argentina Contra el Hambre.
Durante ese encuentro, Fernández anunció que el Banco de Desarrollo de América Latina, CAF, aportará un crédito de US$ 300 millones para financiar la Tarjeta Alimentar, «que se sumará al aprobado a fines de 2020 por la misma suma», agregó Casa Rosada en un comunicado.
Fernández ratificó que el Estado continuará asistiendo a los sectores más empobrecidos, y aprovechó para expresar su preocupación por el precio de los alimentos. «No puede ser que esta oportunidad de desarrollo se convierta en un aumento de precios», se quejó.
«Mi reclamo al retorno de la ética también tiene como destinatario al que produce, porque el primer compromiso tiene que ser con la sociedad en la que se desarrolla», señaló en un claro mensaje a las entidades agropecuarias.
El precio de los productos que integran la canasta básica alimentaria habían arrojado en diciembre pasado una fuerte suba de 5,1% en comparación con noviembre, y de 45,5% en 2020 frente a 2019.
Mañana el INDEC dará a conocer el IPC de enero, para el cual los analistas privados esperan una suba de 4% a 4,3%. A pesar de las expectativas de mayor presión inflacionaria, el ministro de Economía, Martín Guzmán, dijo ayer que es posible reducir la inflación 5 puntos en 2021.