BUENOS AIRES (ANP) El Banco Central corre el riesgo de dejar de ser un comprador neto de divisas en el segundo semestre y pasar a ser vendedor, incluso perdiendo gran parte de lo ganado en la primera mitad del año, advirtió la consultora Invecq en caso de no aplicarse modificaciones al actual esquema cambiario.
Esa reversión de la actual posición compradora se basa tanto en el repunte estacional de la demanda de divisas por importaciones como a los resultados menores a los esperados en materia de liquidación por parte del sector agroexportador, en un contexto en el que el Tipo de Cambio Real (TCR) «ya está 4% por debajo del promedio de enero-noviembre 2023», indicó la entidad presidida por Esteban Domecq.
Como balance de los primeros seis meses de la Presidencia de Javier Milei, Invecq destacó que desde el 11 de diciembre «el BCRA acumula compras netas por US$ 17.160 millones en el mercado de cambios (MLC)» y de esa manera las reservas brutas «pasaron de US$ 21.209 millones a US$ 29.113 millones, y las netas de US$ -11.225 millones a US$ 350 millones».
«Esto fue posible, principalmente, por la devaluación de diciembre, y por el esquema de acceso al MLC vigente para importadores (en I-T se pagó el 41,7% de las importaciones devengadas, un ahorro de US$ 7.600 M)», indicó, además de señalar que «la fuerte recesión jugó a favor de las cuentas externas (las cantidades importadas cayeron entre 7% y 30% durante el primer cuatrimestre, excluyendo combustibles y lubricantes -que se desplomaron 65%-).
Sin embargo, acotó que «la situación se tornará mucho más desafiante hacia la segunda parte del año» debido a «un importante repunte en la demanda de divisas por importaciones», que podría implicar que se vayan «US$ 13.000 millones adicionales en el segundo semestre en relación con el primero».
Asimismo, la consultora subrayó que «habrá que seguir de cerca el nivel del tipo de cambio real», ya que «ya está 4% por debajo del promedio de enero-noviembre 2023» y de seguir apreciándose, «podría demorar la liquidación de divisas en el MLC».
En ese sentido, precisó que «pese a que se espera un repunte, el agro podría vender solo lo necesario para cancelar compromisos y/o comprar insumos -financiándose en pesos a tasas reales negativas-, a la espera de un mejor precio».
«En otras palabras: de mantenerse el esquema cambiario actual, en el segundo semestre el BCRA pasaría a ser vendedor neto en el MLC, y hasta podría perder lo ganado durante la primera parte del año», alertó, ya que si bien «el rojo de Cuenta Corriente podría financiarse vía ingreso de capitales privados, con el cepo actual luce prácticamente imposible».
Para Invecq, el FMI «podría traer algo de aire» y más desembolsos, en el marco de un nuevo programa, podrían ser la carta que permita, entre otras cosas, desmantelar las restricciones cambiarias, y por ende seguir con el saneamiento del balance del BCRA».