BUENOS AIRES (ANP) La degradación de la Educación no afecta de manera homogénea a todos los estratos socioeconómicos, al punto que los problemas de aprendizaje de lengua y matemática son casi tres veces más intensos entre los alumnos de lo sectores más relegados en relación con los de mayores recursos, según un análisis dado a conocer hoy por el Instituto para el Desarrollo Social Argentino (IDESA).
«Es pertinente observar los resultados que está dando el sistema educativo argentino por nivel socioeconómico de los jóvenes», indicó la entidad, para referirse a los resultados surgidos de las pruebas Aprender, respecto a los chicos que terminan sexto grado con niveles insuficientes en lengua y matemática.
Al respecto, IDESA precisó que los niños que presentan dificultades en ese aspecto es del 24% entre los de nivel socioeconómico alto, sube al 42% entre los de nivel medio y trepa al 70% para los chicos de nivel socioeconómico bajo.
«Estos datos muestran que la degradación de la educación afecta a todos los estratos socioeconómicos, aunque con intensidades muy diferentes», planteó el instituto dirigido por Jorge Colina, que aclaró que «en los hogares de más altos ingresos, uno de cada cuatro niños que termina la primaria no sabe leer, escribir, sumar ni restar», relación que asciende a tres de cada cuatro entre los niños pobres.
En ese sentido, luego de alertar que «la decadencia del sistema educativo opera como un gran proveedor de mano de obra barata para la delincuencia y el narcotráfico», manifestó que «resulta muy pertinente comprometerse con mejorar la educación», pero al mismo tiempo advirtió que «no va a mejorar impulsando a que la Nación -con plata- arregle las deficiencias de las gestiones provinciales».
Para asegurar que «el principal problema no es la falta de recursos, sino el ausentismo docente masivo», IDESA señaló que «según el Ministerio de Educación nacional, en las provincias hay 13 alumnos de primaria por cada cargo docente al frente de alumnos».
«Los futuros presidentes no se deberían comprometer a mandar más recursos a las provincias, sino a presionar para que las provincias mejoren la gestión educativa haciendo que premien a los docentes que dan clase y logran mayor aprendizaje de los alumnos y penalicen a los docentes que no trabajan», sentenció.
IDESA sostuvo que en un entorno social y familiar muy degradado, «en muchos casos la educación de los niños pasa a un segundo plano, frente a las urgencias de darles contención».
«Esto marca la enorme importancia de que la Nación garantice una macroeconomía sana», ya que «bajar la inflación y aumentar el empleo son los compromisos más importantes que la Nación tiene con la educación», aseveró.
En línea con su reclamo por avanzar en un ordenamiento del Estado, IDESA remarcó que «el compromiso con la educación debería establecer que cada nivel de gobierno cumpla con solvencia las funciones que le corresponde» y que las provincias «tienen que mejorar la gestión educativa, en especial, la de los recursos humanos», mientras que la Nación se debe abocar a «mejorar la macroeconomía y las instituciones laborales para que haya menos pobreza».
«Pero, además, como plantea el Compromiso por la Alfabetización, hay que establecer exámenes periódicos y censales cuyos resultados sean ampliamente difundidos en medios de comunicación masiva con la pauta oficial. La meta debería ser empoderar a la gente para que presione a sus gobernadores por una mejor educación», finalizó.