Para los analistas de los mercados, es casi seguro que dentro de un par de años, el FMI y la Argentina van a estar renegociando nuevamente. Es casi una certeza de que el acuerdo que pueda llegar a firmar el actual gobierno de Alberto Fernández, no se va a terminar cumpliendo. Algo de eso tiene que ver con condiciones políticas y otras con los propios limitantes económicos.
«Esto es un stand by puente de dos años, donde el FMI sabe que dentro de dos años tiene que negociar con otro gobierno. No veo incentivos para que la oposición no apoye esto», señaló el economista Esteban Domecq, director de la consultora financiera Invecq, en el marco de una charla con inversores organizada por GMA Capital.
El economista planteó que el gobierno es como una persona encerrada en una sala de escape, donde tiene que encontrar una salida.
Al respecto, señaló que el gobierno tiene tres potenciales puertas de escape a la crisis:
«La puerta 1. implica Moderación política, consensos, acuerdo con el FMI, programa macro para meter un ajuste controlado con inflación de 60%, y una economía que pueda crecer más uno, mas dos o mas 3. El dilema de esta puerta es que es con gancho del FMI y con ajuste»
«La puerta 2 dice: Moderación política pero sin acuerdo con el FMI. Yo quiero seguir negociando, entro en atrasos, no logro el acuerdo. El ajuste macro no es controlado (lo empieza a hacer la economía) y la inflación 80%, 90% a 100% y el PBI da cero, menos uno o menos dos».
«La puerta 3 dice : Radicalización política, pateo del tablero al FMI, disrupción macro, crisis cambiaria, inflación de tres dígitos el PBI cae fuerte»
Domecq señaló que «esto es lo que esta crujiendo la interna del oficialismo».
El economista señaló que «una parte de la coalición quiere transitar la puerta 1, pero la alternativa 1 que se le abre no es un con programa hard con reformas, estructuraciones y consolidación agresiva, (lo que sería un suicidio político porque le corta las piernas al oficialismo y le deja la economía ordenada al próximo gobierno), sino es un acuerdo ligth. con algunos incumplimientos». «Politicamente ata de manos pero no le corta la piernas al oficialismo y los deja con vida de cara al 2023. El gobierno esta viendo que la única alternativa es la puerta 1 con un programa ligth». «Una especie de plan antivuelco, para que la economía inflacione de manera controlada (50% a 60%) y la actividad no se recienta», señaló.
El titular de la consultora Invecq señaló que los funcionarios del gobierno «abrieron la puerta y ahora hay que ver si la atraviesan o no».